Creador de Jurassic Pan halló la fórmula para que recordaran su negocio
Javier Trentacoste es un argentino radicado hace cinco años
Utiliza solo masa madre y distribuye a hogares y cafés de Santiago. "Si vamos a comer tanto pan todos los días, lo lógico es que este sea lo más saludable posible", cuenta el panadero.
Fecha de publicación
2019-09-02
Escrito por
Rodrigo Sepúlveda S.
Durante el tiempo que trabajó como conductor de Cabify, varios pasajeros le preguntaron a Javier Trentacoste, argentino residente en Chile desde hace cinco años, cómo había llegado a aquel oficio. Su respuesta siempre era lo misma: "Lo hago para juntar dinero para instalar una panadería".
Así, sin que ninguno de ellos se lo propusiera, esos pasajeros anónimos terminaron ayudándolo a elegir el nombre de su emprendimiento. "Cada vez que yo contaba sobre mi proyecto, me mencionaban una panadería de algún sector de Santiago, pero de la que no recordaban el nombre exacto. Me hablaban de una en Providencia que terminó siendo La Popular, y otra en Barrio Italia, que era La Panadera. No eran nombres estrambóticos o impronunciables, y yo me quedé pensando que la única forma de que la gente recordara mi negocio era poniéndole un nombre muy distintivo. Así nació Jurassic Pan, hace cerca de año y medio", cuenta este mendocino de 44 años.
Hoy, Jurassic Pan elabora entre 50 y 60 kilos de pan al día y provee de hogazas de medio, uno y dos kilos, a cafés y hogares de Santiago (http://bit.ly/30LHq2K), con precios desde los $1.800. Su sello distintivo, además del nombre, es el uso de masa madre y la gran variedad de sabores, entre los que están el pan de zapallo, de betarraga, de aceitunas verdes y negras, de pimientos verdes, amarillos y rojos, de cebolla caramelizada sin azúcar, de ajo asado, de pasas y canela, de zanahoria-jengibre, y de ciruelas, por mencionar algunos.
"Muchos padres me cuentan que la única forma en que sus niños se coman una betarraga es con mi pan. Esa variedad la hago con el jugo que queda después de ponerla en un extractor, tal como si fuera una naranja. Eso hace que el pan sea mucho más sabroso y nutritivo porque conserva mejor las propiedades naturales de la betarraga", afirma Trentacoste, ingeniero informático de profesión.
-¿Por qué querías trabajar haciendo pan?
-No encontraba lo mío. Me fui de Argentina hace 23 años, viví en Italia, Francia, España y Estados Unidos, y trabajé en una infinidad de cosas. Hasta visitador médico fui. Siempre me gustó cocinar y todos mis amigos me decían que tenía que vivir de esto. En un momento me animé a intentarlo y, bueno, aquí estamos.
-¿Qué fue lo que te atrapó del pan?
-La masa madre. Me encantó su proceso, el trabajo manual que implica. Me dan ganas de hacer pan siempre. Para aprender bien tomé un curso en la Escuela Artebianca, pero lo mejor que hice para empaparme del tema fue irme a Machalí por tres meses. Ahí conseguí un trabajo en una panadería. Trabajaba gratis, solo para aprender absolutamente todo sobre el pan y también para ver en terreno si era capaz de dedicarme a esto.
-El pan en Chile siempre ha estado de moda.
-Acá comen mucho pan. Parten en el desayuno, siguen con un poco de pan al almuerzo y después de nuevo a la hora de once. Eso me hace mucho sentido con lo que estoy haciendo, porque yo quería ofrecer algo sabroso pero natural y nutritivo a la vez. Pienso que si vamos a comer tanto pan todos los días, lo lógico es que este sea lo más saludable posible, que no te cause acidez, que no te hinche y que sea ligero.
Jurassic Pan
Teléfono: +569 90840440
Mail: javitren@yahoo.com
Instagram: @jurassicpanchile
"Para aprender bien tomé un curso en la Escuela Artebianca", afirma Trentacoste.
De esta manera, los niños también comen betarraga.