Carrito es el camaleón de las ofertas
Según la ocasión aparecen huesillos, palomitas o maní
En el verano, el rey es el mote con huesillo y el resto del año el maní confitado con las palomitas.
Fecha de publicación
2015-01-26
Escrito por
Melissa Forno M.
Hay personas que ven el pronóstico del tiempo en la noche para saber qué ponerse el otro día.
Javiera Espinoza y Rodrigo Morales lo esperan para conocer qué venderán en su carrito de República. Cuentan con tres opciones: mote con huesillo, si hace calor y maní y palomitas para las temporadas más frías.
Ambos llevan ya cuatro meses con el negocio y afirman que los santiaguinos tienden a determinar lo que comen según el clima. Javier cuenta que los días que llovió en invierno las personas que pasaban por el barrio se acercaban a comer maní y, a medida que subían las temperaturas, optaban por el mote con huesillo. Por este motivo, Javier explica que en su negocio es fundamental tener claro cómo estará el tiempo al día siguiente.
Los dos apostaron por dejar sus trabajos y comenzar un emprendimiento en pareja. Fue así como luego de recorrer varias estaciones del Metro de Santiago para buscar y conocer quienes ya estaban vendiendo, encontraron el sector donde se instalarían con un carro que ofrecería mote con huesillo, maní confitado y palomitas: el barrio República, que tiene la particularidad de contar con un público universitario en la semana y, sábados y domingos, con uno más familiar y que, por esas cosas del destino, es el lugar donde habían decidido vivir cuando decidieron venirse de Puerto Montt.
Explica que casi todo el año los niños que van a jugar al sector los fines de semana son los fieles clientes de las palomitas, que tienen un toque especial de vainilla. Por otra parte, "los más jóvenes del barrio, las compran para llevárselas al cine o cuando ven películas en la casa", cuenta Morales.
El mote lo venden a $500 pesos el vaso chico, $600 el mediano y $1.500 el de litro. El paquete más chico de palomitas cuesta $350, $500 el mediano, $800 grande y $1.000 el XL.
Javiera Espinoza y Rodrigo Morales tienen planes para crecer.