Cómo nos afecta el bolsillo el alza del dólar

Anota un salto de 17 pesos en solo 10 días, lo que podría reflejarse en el precio de bienes importados.  

Cámara de Comercio de Santiago

Cada vez que el precio de dólar sube en forma importante vuelve nuestra preocupación por saber cómo afecta nuestras finanzas personales. En los últimos 10 días el dólar ha subido 17 pesos, magnitud suficiente como para revisar las principales áreas de impacto en nuestro bolsillo.
En términos simples, un dólar más alto debiera encarecer todos los bienes y servicios que compro en el exterior o que provienen del exterior (las importaciones en este último caso). Es decir, un alza del dólar disminuye nuestro poder de compra en esa moneda.
Por ejemplo, para comprar un pasaje de avión al extranjero, cuyo precio normalmente está fijado en dólares, tendré que desembolsar más pesos. Y una vez que viaje, cada dólar que gaste en mi destino me costará más pesos chilenos.
En el caso de los precios de bienes y servicios que consumo en Chile, los efectos se perciben en los precios finales. Hay algunos rubros que se ven afectados casi instantáneamente, como los combustibles, cuyos precios cambian todas las semanas según una fórmula que incluye el precio internacional del combustible (en dólares) y el valor del dólar en nuestro mercado.
En otros casos, el efecto del dólar sobre los precios depende entre otras cosas de qué tan relevantes son las importaciones dentro de lo que se vende en el mercado local. En automóviles, por ejemplo, todas las unidades que se comercializan en Chile vienen del exterior, similar a lo que ocurre en gran parte del mercado tecnológico, mientras que en otros rubros también hay producción local (como en vestuario y calzado). Mientras más relevante sea el origen importado, más directo debiera ser el traspaso a precios.
También hay que considerar que en un período de desaceleración en el consumo, como el que estamos viendo hoy, los comercios tienen incentivos para tratar de no subir precios para no afectar a la demanda, aunque eso signifique reducir sus márgenes.
La buena noticia es que el dólar que vemos hoy no es muy distinto del que tuvimos hace unos cuatro meses, por lo que gran parte de los efectos sobre precios probablemente ya los absorbió el mercado. Esto puede cambiar en la medida en que la divisa siga subiendo.
Por supuesto todas las obligaciones que estén pactadas en dólares, como créditos, se hacen más caras en pesos, lo mismo que los ahorros en dólares (en este caso se hacen más rentables).
Y por último, si soy un pequeño empresario dedicado por ejemplo a la importación, deberé enfrentar un mayor costo en pesos de las mercancías que compro en el exterior, por lo que tendré que optar por subir los precios a mis clientes, o absorber este mayor costo reduciendo mis márgenes (o una combinación de ambos). Por el contrario, si soy exportador, recibiré más pesos por cada dólar de mis ventas, lo que incrementará mis ganancias en moneda local.