Con la mira puesta en los gastos de vacaciones

Es importante respetar nuestro presupuesto inicial y mantener un registro diario de todos los gastos.  

Cámara de Comercio de Santiago

Luego de los gastos extraordinarios de diciembre, que incluyen la celebración de Navidad y Año Nuevo, nos encontramos abruptamente con la necesidad de financiar las merecidas vacaciones de nuestro grupo familiar. El desafío es doble, porque nada más terminado el período estival, cada año se nos aparece marzo con sus propias necesidades de gastos extras.
Al planificar las vacaciones, primero se debe estimar el presupuesto disponible, y en base a él buscar las mejores opciones que se adecúen dichos montos.
En tiempos de dólar alto, los destinos nacionales se hacen comparativamente más atractivos. Afortunadamente, Chile ofrece múltiples opciones con gran variedad de climas, escenarios, tipos de alojamiento y precios.
Una vez definido el destino, debemos evaluar la mejor opción para trasladarnos a él. Los distintos medios de transporte deben ser considerados incluyendo todos los gastos asociados (por ejemplo, si se viaja en automóvil, se debe considerar mantención, combustible, peajes, alimentación durante el trayecto, etcétera.)
Arrendar junto a otra familia o visitar a un pariente cercano puede ser una buena forma de ahorrar en alojamiento.
Hoy en día Internet ofrece múltiples posibilidades para encontrar ofertas o promociones especiales tanto en traslados como en alojamiento, lo que nos puede ayudar a reducir drásticamente nuestros gastos.
Cada vez más la demanda veraniega se concentra en febrero, por lo que tomar vacaciones en enero puede ser una buena alternativa para encontrar más opciones disponibles y mejores precios.