Son pequeños, pero re tentadores

Los productos que lideran las listas de los más robados pesan entre 100 y 300 gramos.  

 
En columnas anteriores hemos analizado los distintos factores que un mechero evalúa a la hora de robar: probabilidad de ser descubierto, cantidad de guardias alrededor, aglomeración de gente en el lugar, día, hora, etcétera. Sin embargo, hay otro particular factor que suele ser determinante: el peso y tamaño del producto que se pretende robar.
Aunque es bastante obvio, no está de más poner en este detalle un poco más de atención ¿Por qué? Según estadísticas de ALTO, los productos que lideran las listas de los más robados pesan entre 100 y 300 gramos, y representan casi el 65% de los productos sustraídos sin pagar. La facilidad que esto representa para esconderlos entre las prendas de vestir, carteras o bolsas es, claramente, un plus ante los ojos de quien quiere llevarlos sin pagar.
Ahora, debemos considerar además que muchas de las especies que cumplen con estas características físicas tienen, coincidentemente, un alto valor comercial. Resultado: blanco perfecto para quienes tienen en mente su hurto y posterior reventa. Así, especies como maquillaje, perfumería, productos gourmet y artículos electrónicos se vuelven altamente apetecidos.
Tome medidas

Ponga el doble de atención a los productos más vulnerables. Si sabemos que el tamaño y valor son factores determinantes para el delincuente, ALTO le recuerda lo vital que es reforzar el cuidado en los sectores que concentren estos artículos dentro de su local.