Una poderosa arma de prevención

Cuando la relación empresa-trabajador toma una relevancia superior.

Sabemos que el trabajo es una de las dimensiones más importantes del hombre. Desde las primeras etapas éste nos define, integrando aspectos relacionados con el ideal que tenemos de nosotros mismos. Por lo tanto la relación empresa-trabajador toma una relevancia superior.

A ojos del trabajador, su empresa debe poder otorgarle las bases para que su ideal individual de trabajo se pueda cumplir. Si su percepción es que estas condiciones no son satisfechas, se generan sentimientos negativos de poderosa potencia. Éstos bajan la productividad, dañan las relaciones interpersonales y pueden generar conductas nocivas como el hurto interno, que pasa a ser interpretado como un acto de justicia en contra de la empresa, reforzado por quienes piensan de la misma manera.

Luego de diversas investigaciones, ALTO -expertos en asesorar a distintas industrias en la reducción de delitos patrimoniales- ha definido las 4 dimensiones bases de la relación empresa-trabajador. La primera es la Sensación de Justicia, que apunta a la capacidad de la empresa para tomar en consideración las antigüedades, competencias técnicas personales y estructuras de compensación y beneficios equitativas en sus procesos internos. La segunda dimensión es la Dignidad, que se relaciona con la satisfacción de las necesidades básicas para el normal desenvolvimiento de los trabajadores. Los aspectos físicos y de relación jefe-trabajador tienen la mayor preponderancia. El Desarrollo se refiere a aquella capacidad de irse perfeccionando cada vez más dentro de su trabajo mediante la obtención de nuevos conocimientos. Por último, hemos determinado que la Proyección Interna es vital. Se define como la posibilidad de ir moviéndose dentro de las organizaciones, de manera vertical y horizontal.

Este modelo es aplicable a todo tipo de organizaciones y según nuestra experiencia genera mejores relaciones entre empresa y trabajador, teniendo una directa relación en la disminución del hurto interno.