Este negocio nació de una herencia familiar

Los churros son la especialidad de Isanic

No estamos hablando de dinero sino del conocimiento y la experiencia que Rodrigo Rissios adquirió viendo a su padre trabajar por varias décadas en este rubro.  

Ciro Colombara C. 

Mucho antes que los grandes carros de comida se pusieran onderos y pasaran a llamarse "food trucks", el papá de Rodrigo Rissios -Gregorio- se instalaba en distintos lugares de Santiago ofreciendo un tentador producto. "Diría que fue uno de los pioneros en el rubro de los churros y se mantuvo en él por varias décadas. Cuando yo era chico, recuerdo que se ponía a vender al lado de los juegos Diana o en la FISA".
Esa herencia familiar fue la que tomó este profesional de la informática para abrir la cafetería especializada en churros gourmet Isanic. "Mi área de trabajo no ha estado muy buena últimamente y por eso pensamos con mi señora, Natalia Rojas, invertir los ahorros que teníamos en un negocio. De forma esporádica ya estábamos trabajando con los churros, instalándonos con un carro en algunos eventos especiales como ferias, pero sin duda que esta apuesta es mayor".
Rodrigo Rissios cuenta que llevan funcionando cuatro meses y medio. "Conseguimos una buena ubicación, en Avenida Francisco Bilbao 2024, justo al frente de la salida de la estación del metro Inés de Suárez. Como crecí ligado al rubro, estoy bien familiarizado con los secretos para ofrecer un producto de calidad".
-¿Cuántos tipos de churros tienen?
-Tenemos churros tradicionales, en el sentido que son sin relleno. Los ofrecemos con varias alternativas de salsas para untar, como frambuesa, caramelo, manjar y chocolate. Es posible comprar porciones de 6, 12 y 18 unidades. También tenemos algunas promociones, por ejemplo una de churros con helado artesanal y otra que incluye un chocolate caliente.
Rissios agrega que están en los últimos trámites para incorporar a su menú churros rellenos con manjar, nutella, chocolate y crema pastelera. "Si bien ya hacemos algunos, necesitamos las máquinas para tener una producción constante. Yo diría que dentro de muy poco tiempo van a estar disponibles. Un punto que nos distinguirá aquí es la elaboración casera de esos rellenos, que se va a sumar a otros elementos que ya nos caracterizan como el tener un espacio abierto -a la vista de los clientes- donde hacemos los churros. Además, se van elaborando en la medida que los clientes los piden, no tenemos productos guardados ni trabajamos con masas prefritas".
-¿Cuál es su horario de atención?
-De lunes a viernes desde 8:30 a 20:30 horas y los sábados desde las 16 a las 20:30 horas. Durante la semana el público es bien variado, llegan estudiantes de las universidades que están en el sector y también oficinistas. Por aquí hay varios bancos y también automotoras así que sus empleados vienen bastante. El sábado, en tanto, atendemos principalmente a los vecinos del barrio.
-¿Y qué significa este nombre?
-Lo creamos con las primeras letras de nuestros hijos, Isabella y Nicolás.
Este emprendedor comenta que para mantener un movimiento constante en el negocio, armaron una carta que permite satisfacer todas las demandas de los consumidores. "Ofrecemos algunas alternativa de desayuno y de almuerzos, tenemos sándwiches, helados y hace poco incorporamos algo de bollería, elaborando por ejemplo rollitos de canela. Ahora, los churros son los grandes protagonistas, cerca del 90% de la gente que atendemos llega atraída por ellos".

"Mi padre, Gregorio, fue uno de los pioneros en este rubro", Rodrigo Rissios.

Mi padre, Gregorio, fue uno de los pioneros en este rubro. Rodrigo Rissios

Cada pedido se elabora en el minuto, no hay productos almacenados.

Hay cuatro rellenos disponibles: manjar, crema pastelera, chocolate y nutella.