Ñuñoa tiene un almacén hipoalergénico

Fibra abrió sus puertas hace 4 meses

La base del negocio está en su stock de productos libres de proteína de trigo, de azúcares refinadas, soya y aditivos de origen químico, entre otros.  

Ciro Colombara C. 

¿Un negocio de barrio hipoalergénico? Si bien puede sonar un poco extraño ese concepto, se trata de algo muy simple y además de gran utilidad para un amplio abanico de personas que sufren algún tipo de intolerancia. Es que tal como cuentan Juan Pablo Astorga y Diego Varela, socios que partieron en diciembre del año pasado con el Almacén Fibra (Pucará 4311, comuna de Ñuñoa), la base de este emprendimiento está en su stock de productos libres de proteína de trigo, de azúcares refinadas, soya, aditivos de origen químico y de la caseína que se les agrega a muchos de ellos, que proviene de la leche de vaca. "Estamos hablando de distintas variedades de pastas, aderezos, vinagres, aceites y snacks, entre otros. Nuestros clientes se encuentran acá con la mayor parte de los alimentos que requieren para cocinar en casa una rica comida".
Si bien el negocio partió hace solo un par de meses, Astorga explica que tienen una larga experiencia en esta área. "La base de él es una microempresa familiar que partió hace diez años, Dulce Gratitud, primero enfocada en dietas vegetarianas y luego centrada en ofrecer productos y servicios -por ejemplo charlas- a personas con algún tipo de alergia alimentaria. Fue recorriendo ese camino que nos dimos cuenta que era importante abrir un espacio donde pudieran abastecerse de las materias primas necesarias para alimentarse sin tener problemas. Así nació Fibra".
-Nombre corto pero bien pegajoso.
-En parte lo elegimos porque suena bien pero en gran medida fue porque grafica de buena manera nuestro concepto. La fibra es un elemento transversal -salvo algunas excepciones- para las dietas saludables de todas las personas. Ahora, hay que decir que el sello no solo está en los productos sino también en el servicio. Tanto nosotros, los dueños, como otras personas que atienden acá pueden guiar de buena manera a las personas sobre los productos más adecuados para consumir.
Respecto a sus proveedores, Diego Varela cuenta que hay productos importados y otros que provienen de pequeños productores nacionales. "Aquí hay un punto importante porque nos interesa que el almacén funcione como una plataforma de difusión de emprendimientos que tengan algún sello "Libre de...". Nos interesa que el negocio sea una vitrina para quienes elaboran alimentos especiales".
-Otro elemento que destaca del negocio es su decoración.
-Sí, la tienda es atractiva visualmente y recrea la estética de un almacén antiguo. Usamos un color que llama la atención, hay un mesón central con una balanza antigua donde están los productos a granel, una serie de granos y semillas. Respecto a ellos, resultan también muy atractivos para la gente ya que pueden elegir la cantidad de acuerdo a sus necesidades y su costo es más bajo porque no considera el pago por el envase. Además, al entregarles bolsas de papel para que los lleven, estamos fomentando un estilo de vida más ecológico.

El negocio busca facilitarles la vida a personas que sufren de alergias alimentarias.

"Queremos ser una vitrina para pequeños productores", cuentan Juan Pablo Astorga y Diego Varela.