Los frutos secos son el gancho de "El Chype"

A la entrada del local hay una colorida oferta de estos productos

Su dueño partió en el rubro como vendedor ambulante y con gran esfuerzo pudo concretar el proyecto de abrir un negocio.  

Ciro Colombara C. 

Variados colores y sabores reciben a la clientela de la Comercializadora El Chype. Perfectamente ordenados al interior de una vitrina que está a la entrada de este local de la comuna de Recoleta, hay distintos tipos de maní, pasas, nueces y frutas confitadas, entre otros. "Son productos de alta demanda, sobre todo ahora que entramos a la época más fría del año. A la vez, funcionan muy bien como gancho para atraer gente al local y que pueda ver el resto de los productos que ofrecemos", cuenta Jhonny Cadillo, su dueño.
Hace dos años que este emprendedor, de origen peruano, partió con el negocio aunque su experiencia en el rubro es mayor. "Yo trabajaba como ambulante vendiendo cabritas y maní confitado que preparaba en mi casa. Fue algo bien sacrificado pero el esfuerzo valió la pena ya que pude concretar el proyecto de establecerme en un local, que queda frente al estadio de Recoleta. Al principio tenía pocos productos pero poco a poco fui ampliando la oferta, tomando en cuenta lo que mi clientela iba pidiendo. Hace tres meses, en tanto, abrí un segundo local El Chype (Recoleta 2116)".
-¿Qué tan amplio es su stock hoy en día?
-Bastante amplio, manejo como 100 categorías de productos. Dentro de los más demandados están precisamente los frutos secos, distintas variedades de harina -como la de avena o de almendra- y semillas como la chía y la quínoa. También tienen buena salida el aceite de oliva y las mieles. A ese stock se suman otros productos que no pertenecen a mi rubro principal pero que de todas maneras es bueno tenerlos, como abarrotes y papel higiénico. Como comerciante, uno tiene que tratar de facilitarles la vida a los consumidores.
-Tomando en cuenta que este segundo local es bastante nuevo, ¿cómo se da a conocer entre los vecinos del barrio?
-Por la calidad de los productos y su variedad. Como decía hace poco, el tener una vitrina con frutos secos a la entrada del negocio funciona muy bien. También me preocupo de la atención, de conversar con las personas y contarles el tipo de cosas que vendo. De esa manera uno va poco a poco fidelizándolas y logrando a la vez que lo recomienden con sus familiares y amigos.

"Hay mucha gente que está preocupada de consumir productos saludables", cuenta Cadillo.