Cervezas artesanales llenan de innovación al mercado

Con variedad de marcas, catas y servicios asociados

De acuerdo a datos de Acechi, en el país existen alrededor de 300 productores. Se trata de una cifra destacada, tomando en cuenta que hace diez años no eran más de cinco.

Fecha de publicación

2017-05-15

Escrito por

Ciro Colombara C.

Los chilenos no solamente somos buenos para tomar cerveza sino también para elaborarla, hay datos que lo confirman. De acuerdo a la Asociación de Productores de Cerveza de Chile (Acechi), el consumo per cápita en el país llega a los 46 litros al año y la cantidad de productores de variedades artesanales, en tanto, está en torno a los 300, una cifra destacada tomando en cuenta que hace una década no eran más que cinco. Se trata de una gran oferta, que intenta satisfacer a un público que ya no ve a este producto solo como una alternativa para refrescarse en verano sino como un acompañamiento ideal para variadas ocasiones de consumo.
Andrés Toro y Cristóbal Holmgren son dos emprendedores que se sintieron atraídos por este rubro, partiendo el 2010 con la cervecería Guayacán (http://www.cervezaguayacan.cl). "Somos la primera cervecería del Valle de Elqui y nos instalamos en la localidad de Diaguitas para proponer al mercado un origen distinto. Elaboramos ocho variedades, entre las que están una Golden Ale, una Stout, la cerveza UNO -con solo un grado de alcohol- y Chañar, que se hace con arrope de Chañar, fruto endémico del norte del país".
Andrés Toro agrega que en estos años han visto una evolución en el mercado "ya que los consumidores están mucho más educados que cuando partimos, exigiendo a la vez productos innovadores y especiales. También vemos bastante más conocimiento de las mismas cervecerías y un mejoramiento en la calidad de los productos en general".
-Las marcas artesanales tienen el gran desafío de darse a conocer. ¿Qué tipo de estrategias han seguido ustedes en ese sentido?
-Nosotros nos hemos enfocado en cuatro áreas específicas que son capacitaciones y activaciones en los puntos de venta, trabajo en redes sociales y la web para comunicar los mensajes y educar, asistir a la mayor cantidad de eventos cerveceros, y finalmente el turismo con las visitas a nuestras instalaciones.
-¿Es posible hablar hoy de un sello distintivo en las cervezas artesanales chilenas?
-Creo que nuestra industria carece de una denominación de origen que nos pueda agrupar o reconocer, sin embargo se están haciendo algunas cosas. Nosotros, por ejemplo, estamos bajo el alero de "Marca Chile" con el fin de dar a conocer nuestro país como una denominación de origen,de productos y servicios de calidad.
Respecto a este punto, Francisca Pacheco y Jaime Villalón, socios que el 2013 dieron vida a la marca de cerveza +56 (http://www.cervezamas56.cl), explican que "todavía no hay un sello distintivo a nivel de industria, en parte porque en nuestro país la categoría aún es muy joven. De hecho, la participación de mercado aún no llega al 1%. Pero la buena noticia es que las variedades artesanales crecen mucho más que las industriales".
Esta cerveza tiene una clara identidad nacional, "que se expresa en su nombre ya que +56 es el código de teléfono de Chile. Además, en las etiquetas mostramos típicas frases urbanas que nos identifican como "si poh" o "cachai". En este terreno, como sabemos que hay mucho potencial de ilustradores y diseñadores, esta semana estamos lanzando en nuestras redes sociales -con el apoyo de Marca Chile- un concurso para elegir a un ganador que tendrá la oportunidad de ilustrar Chile en nuestra cerveza. Invitamos entonces a seguir nuestro Instagram y Facebook", agrega Francisca.
-Un actor importante para darse a conocer en el mercado son los bares y pubs. ¿Qué apertura dirían que tienen hacia las cervezas artesanales?
-Hay bares y restoranes que son más receptivos que otros, por ejemplo porque sus clientes les están pidiendo una oferta más amplia y se han dado cuenta que es un valor agregado contar con una buena carta de cervezas. Lo que nosotros vemos es que cada día hay más apoyo por parte de este tipo de establecimientos, pero el camino no ha sido fácil porque no contamos con grandes presupuestos.
Respecto a su propuesta para el mercado, Jaime Villalón cuenta que elaboran tres variedades. "Ellas son una Pale Ale de 5°, una Ámbar Ale de 4,5° y una Stout con Avena de 7°, que es de color chocolate oscuro profundo, con cremosa y persistente espuma color moka. Todas ellas están disponibles en formato botella de 330 cc. y de schop. En cuanto a nuestra producción mensual, estamos con un promedio de 5.000 litros".
Productos innovadores
Granizo es una cerveza artesanal que entró en el mercado hace cinco años y que ha cosechado importantes reconocimientos, copo por ejemplo ser en dos oportunidades la marca ganadora de la Copa Cervezas de América. Óscar Garrido, su dueño y maestro cervecero, cuenta que han visto cómo el mercado ha ido desarrollándose, "con un consumidor más sofisticado y en busca de productos más vanguardistas, con nuevos estilos e ingredientes". Garrido agrega que dicho panorama los llevó a lanzar recientemente una nueva línea de cervezas experimentales, Granizo Series, que se suma a sus once estilos de cerveza, de los cuales cuatro son fijos. "Se trata de Bohemian Laguer, GranIPA, IRA! y la Imperial Stout. A ellas se suman cuatro cervezas de edición limitada".
-¿Qué variedades dirían que son las preferidas por el consumidor?
-Si bien hay una tendencia a buscar alternativas vanguardistas, hay que decir que la mayoría de los chilenos se mantienen en rangos clásicos. En ese sentido, a la hora de hablar de variedades que no pasan de moda, encontramos la Pale Ale y la Stout.
El crecimiento de la categoría no solo ha alentado a pequeños productores sino también a emprendedores que están ofreciendo servicios relacionados a este rubro. Un ejemplo es Beerly (http://www.beerly.cl), club de cervezas que tiene para sus asociados una suscripción con variadas alternativas. Según cuenta su fundador, Pablo Jacobi, por un valor mensual de $12.990 ellos reciben un kit con seis cervezas artesanales chilenas más algún regalo como un destapador. "La idea es ir siempre variando tanto las marcas como los estilos que entregamos para que el consumidor pruebe cosas distintas. Nosotros trabajamos hoy con 18 marcas, lo que nos permite tener más de 50 tipos distintos de productos".
Jacobi agrega que una vez al mes organizan catas de una marca específica, guiada por su maestro cervecero. "Aquí no solo explican sus características sino también las maridan con distintos productos como sushi, tablas de queso o incluso chocolate. Nosotros vemos harto interés de la gente por participar de este tipo de actividades y por saber más sobre las cervezas artesanales. Estamos hablando de una categoría que crece entre un 15% y un 20% anual y que, a la vez, nos ha permitido desarrollarnos".
En ese desarrollo han jugado un importante papel distintas instituciones ya que Beerly fue parte de la generación 14 de Start-Up Chile, de Corfo. "Eso fue el 2015 y el 2016 comenzamos a trabajar con un fondo de este mismo organismo, apoyado por la incubadora de la Universidad Austral de Chile. A la vez, estamos empezando ahora un proceso de levantamiento de capital a través de la plataforma de crowdfunding Broota, buscando 40 millones de pesos por el 10% de la participación en la empresa", detalla Jacobi.

Copa premia los mejores exponentes

Entre el 16 y 22 de octubre se llevará a cabo en el país una nueva versión de la Copa Cervezas de América. Se trata de un evento que partió en 2011 y que el año pasado contó con la participación de 16 países, 256 cervecerías y 1.043 cervezas artesanales. "Este evento ha servido como una plataforma anual de encuentro y educación en temas asociados a la bebida, a través de la premiación de las mejores cervezas artesanales del continente, una conferencia que cuenta con los mejores exponentes internacionales en el rubro y una completa exposición de proveedores", explica su presidente, Daniel Trivelli.
El ejecutivo agrega que este certamen tiene un gran valor para todos los microcerveceros que participan ya que les da la posibilidad de compartir experiencias y acceder a nuevas formas para optimizar sus procesos de creación de cervezas. "Además, les permite estar actualizados respecto de las últimas tendencias en la elaboración de cervezas e ir al ritmo que genera el dinamismo característico de esta industria".