Aceites de oliva cosechan gran éxito en el país

Aumenta la producción y su consumo

Hace cinco años, entre la Primera y la Séptima Región se producían diez mil toneladas, cifra que aumentó a 18 mil toneladas el 2015 .  

Ciro Colombara C. 

4.800 hectáreas plantadas en el año 2005, 22 mil hectáreas el 2010 y 25 mil hectáreas el año pasado. Estas cifras, emanadas de ChileOliva, son una foto perfecta del desarrollo que ha tenido durante la última década en el país la industria del aceite de oliva y que concentra su trabajo entre las regiones Primera y Séptima.
Si bien no tenemos tanta tradición como los españoles o italianos, en pocos años nuestros productos se han posicionado dentro de un selecto grupo que destacan por su gran factura, obteniendo una serie de reconocimientos internacionales. Esos pergaminos, en todo caso, no significan que no haya mucho trabajo por hacer porque en el mercado nacional los aceites de oliva tienen un amplio potencial de crecimiento.
Según detalla Catherine Wevar Zencovich, gerenta comercial de Terramater, "el mayor conocimiento sobre sus propiedades nutricionales y saludables ayuda a que su consumo se haya incrementado en los últimos años. Eso sí, el per cápita aún es bajo si se compara con países europeos, bordeando los 450 gramos anuales". La ejecutiva agrega que la preferencia por los aceites de oliva ha ido aumentando en todas las esferas de la sociedad, "aunque el precio todavía es un elemento que lo hace un producto prohibitivo para algunos segmentos".
Algo similar dice Rodrigo Abatte, director comercial de Las 200, quien cree que este producto es cada vez más transversal, "debido a sus beneficios para la salud y a los precios más asequibles. No obstante, sigue siendo de segmentos socioeconómicos medio-alto".
Henry Jurgens, dueño y gerente general de Las Piedras, detalla que el aceite de oliva se ha masificado mucho en Chile, "por ejemplo ya casi no se ven restaurantes que tengan en sus alcuzas otro tipo de aceite. Lo mismo sucede en los hogares. Nos hemos acostumbrado de a poco a utilizarlo en el día a día en forma transversal".
-¿Y qué tipo de estrategias creen que es posible llevar a cabo para seguir aumentando su penetración en el mercado?
-Creemos que la educación es lo más importante, hacer degustaciones y catas para que la gente conozca las diferencias entre una variedad de aceituna y otra, que aprenda a reconocer un aceite de buena calidad y que realmente haga bien a la salud, porque no cualquier producto aporta al organismo. Las redes sociales ayudan mucho a ahondar en estos temas y nosotros las utilizamos mucho para informar. También contribuye a este fin el desarrollo de packs y formatos de regalo.
Rodrigo Abatte, de Las 200, también apuesta por la educación al consumidor, "enseñándoles los múltiples beneficios que tiene el aceite de oliva para la salud -como sus antioxidantes y vitaminas A, D, E y K, entre otras cosas-, además de las distintas formas de utilizarlo en las comidas ya que no sólo sirve para aliñar ensaladas sino también para cocinar o sellar alimentos. Al menos un par de veces al año y en conjunto con ChileOliva, nosotros realizamos campañas de educación al consumidor en puntos de venta, principalmente en retail".
Un sabor suave
La mayor parte de las variedades de olivos presentes en el mundo provienen del Mediterráneo y podríamos decir que Grecia, Italia y España son la cuna de este producto.
Tal como explica Catherine Wevar Zencovich, de Terramater, "de esos países comenzaron a llegar los aceites a Chile y también las primeras variedades aceiteras de olivos. Actualmente, las más importantes que se cultivan en el país son Arbequina -que corresponde al 70% de las plantaciones-, Arbosana, Frantoio, Leccino, Picual, Koroneiki y Coratina, que se utiliza generalmente para enriquecer mezclas y no como monovarietal".
-¿La demanda se concentra en alguna de estas variedades?
-Lo que más hay en el mercado es Arbequina, es a lo que la gente está más acostumbrada. Lo que pasa es que los consumidores buscan en general un sabor suave, aunque hemos notado que cada vez más personas están innovando y buscando más amargor y picor en los aceites de oliva.
En Las Piedras también mencionan a Arbequina como la principal variedad, "porque es un aceite que queda bien con todas las preparaciones, resaltando el sabor original de las comidas, sin tomar un rol protagónico". Henry Jurgens hace notar, eso sí, que en general el consumidor chileno no se fija si está comprando un blend o un mono varietal, "porque no todos saben que el aceite de oliva tiene cepas al igual que el vino. Por eso, la idea es que la gente vaya aprendiendo que existen distintas variedades y pueda elegir lo que más le guste".
Para Rodrigo Abatte, director comercial de Las 200, los aceites de oliva más suaves son los que concentran la demanda aunque percibe que lentamente se está produciendo un cambio de hábitos. "Los aceites más fuertes, con niveles superiores de amargor y picor, están creciendo y esto se explica porque los consumidores están buscan mayor complejidad en los productos. Un ejemplo es lo que pasa con Las 200 Picual, uno de los pocos aceites de oliva más intensos del mercado, que ha crecido bastante en ventas".
-¿Y cuál es su más reciente lanzamiento?
-Primero, decir que nosotros tenemos diferentes productos bajo las marcas Las 200 y Olivo de Plata. En cuanto a lanzamientos, hace algunos meses pusimos en retail un formato de Las 200 de 15 ml., que viene en una caja con 12 unidades, ya sea solo de aceite de oliva o mitad aceite y la otra mitad de aceto balsámico. Es muy útil para que las personas las puedan llevar a sus trabajos, a un picnic o mandárselas a los niños para el colegio.
En Terramater explican que trabajan las marcas Casta, Canepa, y Petralia; y que a mediados de mayo lanzaron Novello 2016 con una fiesta en su fundo. "Es el primer aceite de la cosecha 2016 y se caracteriza por ser un aceite no filtrado, de un color verde intenso, con gran presencia de antioxidantes. En boca tiene un amargor y picor más pronunciado, dado que es lo primero que cosechamos", detalla Catherine Wevar Zencovich.
Henry Jurgens, dueño y gerente general de Las Piedras, destaca un aceite de oliva en formato de 20 cc. como su más reciente novedad. "Se utiliza mucho en los hoteles para el room service y también ha sido un gran éxito en la venta a hogares, porque es una excelente solución para que los niños lo lleven al colegio o para que los adultos los lleven a sus trabajos para aliñar sus almuerzos".

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Nutricionistas recomiendan su consumo en variadas preparaciones

Para la nutricionista y jefa del programa "Vivir Bien" de Sodexo Servicios de Beneficios e Incentivos, Paulina Hernández, el aceite de oliva es un producto a considerar en las dietas. "Es un alimento del grupo de las grasas y aceites, que entrega un aporte importante de ácido grasos esenciales -que el organismo necesita pero que no puede producir- y que son un gran aliado en la prevención de enfermedades cardiovasculares. El ácido graso Omega 9 es el componente más importante del aceite de oliva, que tiene un comprobado efecto positivo sobre el colesterol, ya que disminuye en la sangre el colesterol malo (LDL) y total".
-¿En qué tipo de preparaciones se recomienda usarlo? ¿Principalmente en ensaladas?
-Lo recomendable es consumir los aceites crudos, en ensaladas por ejemplo. En otros países lo usan en el pan, en reemplazo de la mantequilla, lo cual obviamente es más sano. En el caso de las frituras es importante considerarlo ya que por su composición es más estable a altas temperaturas. Freír en aceite de oliva en lugar de hacerlo con aceite común o de otros vegetales, resulta menos dañino para el organismo.
-¿Y qué cantidad es recomendable consumir diariamente, por ejemplo?
-Las cantidades dependen de los requerimientos personales, pero a grandes rasgos una cucharadita de aceite en las ensaladas está bien.

"El aceite de oliva cada vez se vuelve más transversal", explica Rodrigo Abatte.

Novello 2016 es el primer aceite de la cosecha de este año.

Superficie plantada de olivos en Chile.

Jurgens comenta que es importante ir educando a los consumidores.