El consumo sintió el fuerte empujón

 

 
Parafraseando al a veces incomprendido Pepe Tapia, "la televisión penetra". Y lo hace para bien, ya que en el caso de la leche ha sido de gran ayuda para potenciar su consumo en el país. De hecho, en el año 2002 la Sociedad Promotora de Productos Lácteos (Promolac)
-que congrega a los productores de leche a través de Fedeleche y a las principales empresas lácteas- puso en marcha la primera gran campaña televisiva que buscaba incentivar su consumo bajo el eslogan "Yo Tomo". A partir del 2010 se decidió ampliarla, sumando a otros productos lácteos -como el yogur y el queso- a través del concepto "Yo Tomo, Yo Como".
Carlos Arancibia, gerente de Promolac, comenta que estas iniciativas han obtenido resultados favorables, "principalmente por el impacto que han tenido en la población y también en el consumo de lácteos. En la década anterior estuvimos estancados por muchos años en los 120 litros per cápita. Luego de reactivar la campaña, registramos incrementos, lo que se ha complementado con el mejoramiento del poder adquisitivo, el convencimiento de las personas de considerar productos equilibrados y nutritivos en su dieta y también por la diversificación de los productos con nuevas categorías y formatos".
-¿Actualmente cuál es el consumo per cápita que tenemos?
-La Organización Mundial de la Salud recomienda un consumo per cápita anual mínimo de 160 litros. Este año, en Chile el consumo de productos lácteos continúa creciendo y se espera que supere los 150 litros, lo que aún está por debajo de países como Argentina (230 litros), Brasil (169 litros) o Francia (373 litros). Por lo tanto, existe un potencial de crecimiento importante.
Carlos Arancibia hace notar que la campaña es mucho más que comerciales en televisión ya que consideran otros medios de comunicación como radios y revistas, publicidad urbana y actividades directas con los consumidores en colegios y supermercados.