Una dupla que no puede faltar en las celebraciones

Espumantes y cola de mono son parte de una larga tradición

Undurraga es una burbujeante marca que ha innovado en formatos como la lata. Por el lado del cola de mono, la empresa familiar Montpellier se hace notar con una receta casera.  

Ciro Colombara C. 

¿Un brindis? La primera opción sin duda será un espumante, producto que si bien ha logrado romper una marcadísima estacionalidad sigue entregando durante el mes de diciembre las mejores cifras de venta del año. "Hoy la categoría es menos estacional ya que los hábitos están cambiando, haciéndose presente en ocasiones de consumo que antiguamente eran exclusivas de los piscos, cocktail, cervezas y vinos. En la actualidad, el consumo se reparte de manera más equitativa durante todo el año. Aún así, al menos el 35% de la demanda se concentra en este último mes", cuenta Felipe Cousiño, gerente de mercado nacional de Viña Undurraga (https://bit.ly/2rzE6M4).
-¿Hay también una diversificación de las cepas con las que se elaboran los espumantes?
-Sí. Antiguamente la oferta de espumantes se concentraba en variedades elaboradas con las cepas Chardonnay y Pinot Noir pero el desarrollo de la categoría y cambios en los hábitos de consumo ha llevado a que los fabricantes diversifiquemos la oferta. En nuestro caso, además de las cepas ya nombradas, utilizamos otras como Sauvignon Blanc, Riesling, Cinsault, Moscatel y Syrah.
El ejecutivo hace notar que Viña Undurraga, bodega con 135 años de trayectoria en el país, cuenta con una amplia gama de espumantes, "con variedades como Brut, Demisec, Moscato, Extra Brut, Dulce, Nature, Blanc de Blanc y Blanc de Noir, entre otros.
-Además de la botella, ustedes tienen el formato lata. ¿A qué público apuntan con él?
-Siempre es necesario refrescar la oferta, el portafolio y también satisfacer nuevas ocasiones de consumo más cotidianas y relajadas -como eventos masivos, piscinas y playas- donde el formato 750 cc. no es muy eficiente. Además, nos parece que llamamos la atención y acercamos la categoría al público más joven que se está iniciando en ella y que le resulta más conveniente una medida más pequeña, fácil de transportar, sin riesgo de que se rompa y donde no se requieren accesorios adicionales como copas o descorchadores. A la vez, nos permite acercarnos a las ocasiones de consumo de las cervezas y de los "ready to drink", donde la demanda es mayor. Por otra parte, el aluminio de las latas se enfría más rápido que la botella y este tipo de envases es uno de los más reciclados a nivel mundial.
Receta casera
Si hablamos de tradiciones para las fiestas de fin de año, una de las más refrescantes es el cola de mono. Montpellier es una empresa familiar que tiene 41 años en el mercado y donde este producto ocupa un lugar destacado dentro de su catálogo (https://bit.ly/36yP8ju). "Contamos con una gama de cerca de 60 tipos de vinos y licores, entre los que están el pipeño, ron, vodka y espumantes. Partiendo octubre empezamos a elaborarlo y envasarlo para luego enfocarnos en la parte distribución. Hay que destacar que se trata de un producto hecho con una receta casera", dice Hugo Mella, su gerente de ventas, quien agrega que el principal formato es la botella de 750 cc. en caja de 12 unidades. "Si bien está también la botella de 900 cc., su demanda no es tan grande como el envase de tamaño tradicional".
-Con toda la experiencia que tienen en la categoría, ¿cómo recomiendan tomar el cola de mono Montpellier?
-La recomendación es tenerlo en el refrigerador, no en el freezer, por un buen rato porque lo ideal es tomarlo bien helado, a una temperatura entre los 6° y 8°. Al servirlo, además, hay que ponerle un par de hielos para que se mantenga frío. Si bien la manera más clásica de acompañarlo es con un trozo de Pan de Pascua, la verdad es que se disfruta de buena forma con cualquier otro producto dulce, como por ejemplo un chocolate o un pastel.
Hugo Mella explica que abarcan todos los canales de venta y que llegan a todo el país. "En el caso del cola de mono, uno de los nichos más fuertes está en los regalos corporativos a través de las cajas navideñas. Trabajamos con varias empresas que se dedican a ese rubro y nos buscan como proveedores. ¿Por qué? Yo diría que la atención a clientes es uno de los elementos que nos distingue, al igual que la gran calidad de los productos que elaboramos y su conveniente precio".
-¿La demanda de cola de mono crece mucho año a año o más bien se mantiene?
-A diferencia de muchos otros licores que durante un tiempo se ponen de moda, como el ron o el vodka, el cola de mono se mantiene en el tiempo. Es un producto que se ha convertido en una tradición de las familias chilenas, eso sí que concentra toda su demanda en las fiestas de fin de año. Respecto a nuestra producción, año a año crece entre un 10% y un 15%.
 

"Cerca del 35% del total de ventas de espumantes se da en diciembre", dice Felipe Cousiño.

"Somos un empresa familiar con 41 años en el mercado", detalla Hugo Mella.

La producción de cola de mono Montpellier crece entre 10% y 15% al año.