Una mezcla de productos que entrega buenos resultados

Fiambrería y botillería Curicó

Su dueño, José Carranza, destaca que la cuidada atención a sus clientes y los precios son los principales elementos que los diferencian de otros negocios del barrio Brasil.  

Ciro Colombara C. 

El nombre de este negocio -Curicó- se ha mantenido por casi 50 años, a pesar de que los dueños han ido cambiando. "Yo soy el tercer dueño del local y, por lo que sé, le pusieron así porque la persona que lo abrió era de esa ciudad. Llevo cerca de 19 años trabajando en un rubro que no conocía porque antes me desempeñaba en un banco", cuenta José Carranza recordando parte de su historia.
Este comerciante dice que hay dos grandes elementos que los diferencian de otros negocios ubicados en el barrio Brasil (calle Moneda 1798). "Uno de ellos es la atención y el otro los precios. Respecto a esto último, tenemos claro que no podemos obtener los mismos márgenes en todos los productos. Sin duda que también ayuda el llevar tanto tiempo funcionando, uno pasa a ser como un vecino más de confianza. De hecho, a pesar que en las cercanías hay un par de supermercados, no es algo que nos haya afectado mucho a nivel de ventas".
-O sea, un pequeño negocio puede sobrevivir a esa competencia.
-Sí. Lo principal es tratar de tener proveedores que entreguen buenos precios. A la vez, los horarios de atención ayudan. Nosotros abrimos de lunes a jueves entre las ocho de la mañana y las 23 horas, mientras que los viernes y sábado cerramos a la una de la madrugada. Ese horario se explica porque nuestro negocio es una fiambrería y botillería.
-Tienen que satisfacer entonces las necesidades de distintos tipos de clientes.
-Así es. En la mañana temprano atendemos a muchas personas que quieren pan, cecinas y otros alimentos para el desayuno. A la hora de almuerzo vienen sobre todo los vecinos que buscan productos para cocinar como arroz y fideos. En la tarde se empieza a activar el rubro de las bebidas y posteriormente el alcohol.
José Carranza explica que el comportamiento de los consumidores es muy distinto dependiendo del tipo de productos que lleven. "En el caso de las cecinas, en general nos piden las primeras marcas. Llama un poco la atención eso porque muchas veces vienen del supermercado con algunas bolsas y veo que los productos que compran son de las marcas más económicas. En el caso de las bebidas alcohólicas, gran parte de la demanda se concentra en las alternativas más baratas ya que atendemos a muchos estudiantes universitarios. Por eso nos preocupamos de tener siempre ofertas y promociones".
-Este último mes no ha sido nada fácil para el comercio. ¿Qué tipo de problemas son los que ha enfrentado?
-Nosotros hemos podido funcionar bastante bien este último mes. Diría que uno de los principales problemas tuvo que ver con algunos proveedores ya que no nos estaban llegando los pedidos a tiempo. A modo de anécdota, te cuento que una empresa llegó con un despacho dos semanas después de hacerle el encargo. Ahora, viendo lo que estaba pasando, había que tener paciencia y tomar algunas medidas como abastecerse de una cantidad de productos un poco mayor a la habitual para asegurar el stock.
José Carranza cuenta que las personas han agradecido mucho que los pequeños negocios de barrio hayan seguido atendiendo en este difícil periodo. "Reconocen el esfuerzo que estamos haciendo y se dan cuenta que nosotros jugamos un importante papel. Por eso, sería bueno que más comerciantes se organizaran tal como sucede en el caso de los botilleros y la Asociación Gremial de Dueños de Botillerías de Chile. Yo fui su primer presidente y creo que es vital agruparse para transmitir las inquietudes, necesidades y problemas que enfrentamos. Hago un llamado a los comerciantes a que se sumen a este gremio".
 

"Siempre tenemos promociones y ofertas en el local", dice José Carranza.