Aurelio Montes extiende su huella hasta la isla grande de Chiloé

Con vinos y espumantes de uvas plantadas en la isla de Mechuque

Aseguran que podrán extraer uvas para elaborar excelentes vinos, como Sauvignon Blanc, Riesling, Chardonnay, Pinot Gris, Pinot Noir y Gewürztraminer  

Fecha de publicación

2018-07-30

Escrito por


M.M. 


A Viña Montes se le reconoce por innovar, rompiendo esquemas y paradigmas. Fueron de los primeros en plantar en laderas con marcadas pendientes, en incursionar en el Valle de Zapallar y tantos otros hitos en estos cortos, pero intensos 30 años de vida que se cumplen precisamente este año.
La gracia es que Aurelio Montes, presidente, enólogo y guardián del espíritu de la viña, sigue sorprendiendo con un proyecto fuera de los límites vitivinícolas establecidos en Chile; en tierras mágicas y en latitudes similares a las islas más australes de Nueva Zelanda y Tasmania, hecho que potencia su atractivo enológico y transforma esta nueva aventura en un desafío mayor.
A saber, además de la enología, otras grandes pasiones de Aurelio Montes son volar y navegar. Gracias a ellas, pudo recorrer decenas de veces el archipiélago de Chiloé, tanto por cielo, como por mar y tierra, conociendo profundamente las islas que lo conforman. Es así como se incubó la idea de plantar uvas viníferas en la pequeña isla de Mechuque, para dar vida a vinos tranquilos y espumantes, complementando así el amplio portfolio de vinos de Montes.
Esta aventura es considerada extrema. Llegar a la isla no es fácil, desde Puerto Montt hay que conducir casi una hora, luego embarcarse en un ferry para cruzar a la isla grande de Chiloé y luego volver a manejar por una hora y media más, llegando a un pequeño muelle en Tenaún. Desde ahí, se toma un lanchón para recorrer los canales del archipiélago con destino final a la isla de Mechuque, que recibe a los visitantes con una lluvia intensa la mayor parte del año. Superado el traslado, la cara amable de Carmelo y María Teresa, residentes hace más de ocho décadas en la isla, son los anfitriones perfectos para recibir al viajero ya cansado. Su cocina a leña siempre prendida calienta el cuerpo y el alma para dar un impulso para conocer las tierras donde Montes inicia el más reciente de sus sueños, que lo llena de energía y entusiasmo.
Don Carmelo acompaña y supervisa junto a Aurelio Montes la plantación de los primeros clones cuya fruta seguramente dará origen, en un par de temporadas, a nuevas cepas de los reconocidos vinos de Montes. Durante el recorrido, Carmelo sentencia, "si uno dice que va a hacer algo, lo tiene que hacer", así describe la relación que ya estableció con Aurelio Montes, que traspasa el ámbito comercial y se instala en las relaciones de confianza que sólo un hombre de campo aprueba luego de conocer en profundidad a su contraparte.
La sustentabilidad está en la génesis y propósito de este proyecto. En palabras de Aurelio Montes: "Comenzamos a explorar el lugar y logramos un vínculo muy especial y mágico con la comunidad de la isla. Trabajamos en forma colaborativa con los habitantes de Mechuque, capacitando a nuestros vecinos para que después ellos logren seguir desarrollando sus propios proyectos, y de ese modo todos nos veamos beneficiados".
En Mechuque, Montes hace su innovadora apuesta. Con profundos estudios, aseguran que podrán extraer uvas para elaborar excelentes vinos, como Sauvignon Blanc, Riesling, Chardonnay, Pinot Gris, Pinot Noir y Gewürztraminer, gracias al especial microclima que se da en una zona específica de esta isla.
"Con la idea esbozada, se inició una etapa de profunda investigación de la zona. Encargamos un estudio a la Universidad de Chile sobre temperaturas y precipitaciones. Gracias a éste, elegimos el lugar con las condiciones climáticas y de suelo más apropiadas para el proyecto: una propiedad con influencia marina más templada, dado que está naturalmente protegida por una bahía en forma de herradura, de la fría influencia de la corriente de Humbolt", comenta Rodrigo Barría, gerente agrícola de Viña Montes.
Grupo de islas
El archipiélago de Chiloé es el segundo más grande de Sudamérica, y la zona más austral de la cordillera de los Andes. En él, es posible disfrutar de un paisaje marino diseminado de islas de suaves colinas que se transforman en praderas, vegas y matorrales con una exuberante vegetación.
Mechuque es la más occidental de un grupo de seis islas ubicadas al este de la Isla Grande de Chiloé, inmediatamente al sur del golfo de Ancud a 45 minutos en lancha desde el poblado de Tenaún en la comuna de Dalcahue. La visita a Mechuque es, en la actualidad, uno de los paseos más típicos a realizar en Chiloé. La isla es conocida por la particular belleza de sus palafitos con techos de tejuelas de alerce, de su llamativa feria artesanal y pequeño, pero notable museo.



"Logramos un vínculo muy especial y mágico con la comunidad de la isla", Aurelio Montes.


Logramos un vínculo muy especial y mágico con la comunidad de la isla. Aurelio Montes

Logramos un vínculo muy especial y mágico con la comunidad de la isla. Aurelio Montes

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