La particular historia de un bajativo de larga tradición en Chile

Araucano es un licor cuya fórmula contiene 23 hierbas y especias

Hace más de 40 años que la familia Brusco está a cargo de la elaboración de este producto que nació como un remedio para el estómago.  

Ciro Colombara C. 

"Este producto es el resultado del encuentro de dos culturas. Por un lado la europea, de países como Alemania e Italia, y por otro la de los pueblos originarios de Chile, específicamente los mapuches". Así define Emilio Brusco al Araucano, un licor que tiene una larguísima y a la vez muy especial historia ya que fue creado durante el siglo pasado -en la década del 20- como un remedio para el estómago y que se convirtió luego en una cotizada bebida alcohólica. "Nosotros nos hicimos cargo de la marca en la década del 70, y hemos tratado de mantenerla vigente. Hay que decir que mi familia tiene una larga tradición en el rubro licores a través de una fábrica aquí en Valparaíso -Tres Torres- que partió en 1906 mi abuelo Virgilio y que elabora en la actualidad cerca de 30 variedades".
-¿Cuáles son las principales características del Araucano?
-Hay varias cosas que destacan a este licor digestivo. Una de ellas es que se elabora con hierbas autóctonas del país y aquí hay que destacar el aporte de los mapuches. Ellos tienen un amplio conocimiento de la naturaleza y el Araucano se creó con hierbas que fueron sacadas del herbario mapuche. En total, se trata de 23 hierbas y especias, jugando estas últimas también un importante papel ya que le aportan un agradable sabor. Hay que mencionar también que la fórmula se ha mantenido intacta en todo este tiempo y seguirá así en el futuro. Otro punto destacado es que se trata de un licor transversal, gusta tanto a los clientes del bar más popular como a quienes van a restaurantes de primer nivel.
Emilio Brusco cuenta, orgulloso, que en noviembre 2011 la municipalidad de Valparaíso reconoció al Araucano como un licor característico de esa zona. "Y esa no es la única distinción que hemos tenido ya que en 2013 la Fundación Futuro nos entregó otro reconocimiento".
-¿Y qué pasa con el reconocimiento de la gente, tienen una demanda importante?
-Desde hace un tiempo los licores "bitters" se han puesto de moda, la gente los está reconociendo. Si bien en Chile su consumo no es muy alto en comparación a los destilados sí vemos un desarrollo que va de la mano con la creciente importancia de la coctelería ya que los barmen los están incorporando para una serie de preparaciones. Por otra parte hay un aumento en las ocasiones de consumo del Araucano, ya no solo lo piden como bajativo, y mayor diversidad del público que lo toma. Tradicionalmente era para gente mayor pero ahora hay hasta jóvenes que lo mezclan con Coca-Cola.
-¿Cuál es su producción mensual?
-Alrededor de dos mil cajas, o sea unas 24 mil botellas. Ese es el máximo que podemos producir, no hay más capacidad en la fábrica. En cuanto a los clientes, diría que todos los distribuidores grandes del país nos compran este licor. Nosotros no abastecemos directamente a negocios, salvo algunas excepciones como el Cinzano, un local que atendemos hace muchísimos años.
-Una última pregunta. ¿Las nuevas generaciones de la familia ya están listas para hacerse cargo de la fábrica?
-Sí, ayudan en el negocio y diría que están listos para hacerse cargo. El que se está yendo soy yo, mis hijos me dicen que es hora que me quede en casa descansando pero la verdad es que todavía tengo un poco de cuerda para seguir funcionando. Es que le tengo mucho cariño al negocio, imagínese que le ha permitido vivir bien a cuatro generaciones de la familia.

24 mil botellas es la producción mensual de este tradicional licor.

Emilio Brusco muestra el frasco original en que venía el tónico para el estómago.

La etiqueta de este producto, al igual que su receta, se ha mantenido intacta.