En esta botillería todos los días hay una fiesta

El Castillo del Licor, en La Florida

Tiene música e iluminación especial para atraer a la clientela. En cuanto a sus productos, destacan los licores y las cervezas artesanales, ofreciendo cerca de 200 etiquetas.  

Ciro Colombara C. 

En el Castillo del Licor la fiesta parte cuando el sol va en retirada. Su dueño, Francisco Zavala, pone música electrónica, apaga las tradicionales luces de esta botillería de la comuna de La Florida y enciende los LEDS ubicados en el fondo de las estanterías, dejando en primer plano su amplio abanico de vinos, cervezas y licores. "Todo eso le da onda al negocio, lo hace atractivo. Desde que partí con él, en septiembre del 2015, tenía en mente diferenciarme haciendo algo especial y a la vez mejorando las deficiencias que veía como cliente cuando compraba en otros locales. Me refiero a cosas como poca preocupación por atender de buena forma, por asesorar a las personas o tener empaques de regalos para ciertos productos", cuenta Zavala.
Este comerciante agrega que les ha transmitido a sus empleados el principio de escuchar siempre a los clientes. "Acá todos estamos muy abiertos a recibir los comentarios de las personas, que no quedan en el aire ya que muchos de ellos las incorporamos. De hecho, hay un libro de sugerencias que nos permite ir haciendo una mejora continua".
-¿Desde que abrieron hasta ahora, las categorías de productos con mayor demanda se han mantenido?
Sí. Los whiskies y el pisco son los más fuertes, luego sigue el vodka y mucho más abajo el ron. Los vinos tienen también buena demanda, sobre todo entre los meses de julio y octubre. En el caso de la cerveza, las variedades artesanales son las que más llaman la atención. Nosotros manejamos cerca de 200 etiquetas, tanto importadas como nacionales. Incluso vendemos una cerveza elaborada acá en la comuna, que se llama Panul, con buenos resultados. Es importante destacar que tenemos a la vista el precio de cada producto, lo que facilita que los clientes puedan comparar y elegir el que más les convenga de acuerdo a su presupuesto. Hay algunos que se sorprenden de ver muchos precios más económicos que los del supermercado.
-¿Son ofertas especiales o precios de lista?
-De lista. A ellas se suman los precios especiales de las "promos", que son distintas a las de otras botillerías ya que aquí cualquier licor que se lleve junto a una bebida lo consideramos una promoción y tiene un descuento. Y eso no es todo porque al comprar un destilado le regalamos a la persona una bolsa de hielo, que viene con el nombre de nuestro negocio. Es una atención muy bien recibida.
Francisco Zavala cuenta que en un futuro no muy lejano espera llevar el concepto de su negocio a otras comunas. "Me imagino otras sucursales de El Castillo del Licor por ejemplo en Macul, Puente Alto o Ñuñoa. La verdad es que había proyectos para este local pero tuvimos que frenarlos porque el municipio adelantó en dos horas el cierre de las botillerías de la comuna. Ese cambio de horario nos ha afectado con una baja en las ventas del 30% y por eso tuvimos que frenar la idea de hacer una vinoteca en el segundo piso".

"Las promociones incluyen hielo de regalo, que lleva el nombre del negocio".

"Nuestra idea es marcar la diferencia en la comuna", cuenta Zavala.