Traen postres congelados desde Europa para eventos y cafeterías

La Bongelé los importa desde Francia, Inglaterra y España

"Si no usan completamente todas las unidades, pueden seguir congeladas hasta la próxima fecha", dice Benjamin Majluf, importador.  

Una solución para banqueteras, cafeterías, restaurantes e incluso hoteles. Eso ofrece Bongelé, importadora de postres congelados provenientes de Francia, Inglaterra y España, dentro de los cuales destacan los de formato mini -cuyo tamaño es similar al clásico canapé-, que son ideales para los eventos de fin de año.
El fundador del negocio, Benjamín Majluf, cuenta que tenía experiencia previa importando productos desde Francia, ya que posee un local de venta de quesos y charcutería europea, que bautizó como La Fromagerie. Por tal razón, lo contactaron desde el departamento de la embajada del país galo, que tiene la misión de establecer relaciones comerciales con Chile, para tener la representación.
"Al principio, no estaba tan convencido. Dije: 'qué caro debe ser traer un postre versus el costo de prepararlo acá'. Sin embargo, hacerlo en Chile y en cualquier parte del mundo también es muy costoso. Empecé a hacer la investigación de mercado, a ofrecerlos a mis clientes que ya tenía y fui a Europa a ver la planta. Llegando a Santiago hice la primera compra y el embarque lo recibí en mayo de 2023", afirma Majluf, ingeniero comercial de profesión.
Cuenta que los postres se producen en Barcelona, España, en cuatro talleres en Francia, y en Manchester, Inglaterra. En términos generales, una porción pesa entre 75 y 125 gramos.
"Cada taller se dedica a un tipo de pastelería, por ejemplo, el que está en Reino Unido, se enfoca en cheesecakes, carrot cakes, muffins y brownies; el español, prepara productos más boutique, que estéticamente son muy bonitos; en Francia hay uno especializado en volcanes de chocolate, otro en babás, así como en pastelería para vitrinas, entre otros productos más clásicos. Los de mayor demanda son el volcán de chocolate, el cheesecake y los mini bocados, cuyo tamaño es como si fueran un canapé. En términos generales un bocado, a precio mayorista, cuesta alrededor de $600 y la porción de un postre entre $1.200 y $2.000", aclara.
"Cuando el cliente hace la orden, la caja sale del frigorífico, que recibió el producto congelado desde el puerto, y se monta en un furgón a -18°. Así se entrega al cliente para que lo mantenga en el freezer", precisa. Se vende desde una caja que tiene entre 28 y 140 unidades. Además, a través del sitio web se comercializa al detalle.
Añade que entre sus clientes tiene a banqueteros, los que usualmente los utilizan para los buffets de postres o en los coffee breaks. "Les resuelve muy bien un problema, porque no necesitan producir pastelería -cuyo equipamiento y mano de obra es cara- y tampoco tienen mermas de productos. Ellos nos piden una caja y la sirven el día del evento, si no usan completamente todas las unidades, pueden seguir congeladas hasta la próxima fecha", dice.
También sus productos son demandados por hoteles, cafeterías y restaurantes, quienes los ofrecen en sus cartas. "Para una cafetería que tiene que maximizar su espacio para atender clientes y no para cocinar, este tipo de pastelería es fantástica, porque ellos solamente sacan un trozo del congelador y lo sirven al cliente", aclara.
 
La Bongelé
Sitio web: https://www.bongele.cl/
Correo: hola@bongele.cl
Teléfono: +569 9803 9621

Benjamín Majluf junto con una muestra de los mini bocados.