Todo un mundo en encurtidos a la mano

Venden forma digital y en su tienda física, entre varios otros

Su producto estrella son los pickles de pepinos dulces; además cuentan con kétchups, salsas, mostazas y un jugo de tomate.  

Los hermanos Manuela y Lucas Iribarren, diseñadores de profesión, decidieron armar un plan de negocios para vender pickles de pepinos en el año 2012, luego de que el primero visitara a una amiga extranjera en las cercanías de Pucón, y los probara en su casa.
En ese momento, comenzaron a establecer las líneas de lo que sería su futuro emprendimiento de encurtidos By María.
"Nos interesaba que fuera una empresa lo más sustentable posible, por ende, no queríamos usar plástico ni en los procesos productivos ni el packaging; además, buscábamos reciclar y comprar en formato a granel para reutilizar los envases; que la etiqueta estuviera estampada en la frasco para no tener que sacarla y que, al volver a ocuparlo -porque los consumidores lo iban a encontrar bonito- , de todas formas se mantuviera la marca en el vidrio mismo", explicó Manuela.
Otro punto fundamental, añadió, era que sus productos fueran muy ricos, tuvieran pocos ingredientes y fueran fácilmente reconocibles por todos. Por ejemplo, la etiqueta del pepino dulce contiene pepino, cebolla, vinagre de manzana, azúcar, sal de mar, cúrcuma, clavo de olor y semillas de mostaza. Tampoco querían añadir aditivos para alargar su vida útil.
También era clave, agregó, pagar el doble del sueldo mínimo a nuestros trabajadores, "aunque el principio ni yo recibía remuneración", afirmó Manuela.
Fue así como comenzaron a ofrecer los pickles de pepinos dulces a las tiendas gourmet. Actualmente, están presentes en Jumbo y Unimarc, en restaurantes, cafeterías, emporios, e-commerce, además de vender a través de su página web y en forma física en la tienda de la marca en Factoría Franklin, espacio al cual llegaron en enero de 2021, tras un largo proceso de instalación producto de la pandemia y de sufrir el incendio de su cocina en Peñalolén, en septiembre de 2019.
"Cuando partimos había muy pocos productos con esas características, pensaban que solo los distribuíamos. Así entramos a Coquinaria, al Café Mosqueto y a participar en ferias como Echinuco. Luego le vendimos al Liguria y en 2014 comenzamos a levantar fondos estatales de Sercotec, Corfo y ProChile". De ahí crearon una línea de encurtidos: además del pepino dulce - cuyo valor referencial es de $4.500 - , sacaron otro picante, de cebolla morada y ají verde.
"Siempre pensando que en las góndolas se verían muy bonitos por lo llamativo de los colores de estos productos", dijo.
Gracias a otro fondo de Corfo, en 2017, desarrollaron un kétchup. "Tiene pasta de tomates, vinagre de manzana, azúcar, sal mar, pimienta negra, semillas de cilantro, de mostaza y canela. Cuenta con un sello de alto en azúcar, no de sal", detalló. También crearon pickles de piña, de piña con ají, jalapeños, tomates cherry, berenjenas y un jugo de tomates.
Desde sus inicios son parte de la organización de Mujeres Empresarios y Manuela se adjudicó los premios Joven Emprendedora y 100 Mujeres Líderes.
-¿Realizan alianzas con proveedores?
-Sí, por ejemplo, tenemos productos solo en determinadas temporadas, como los jalapeños y los tomates cherry. Además, hemos generando algunas relaciones comerciales. Estamos trabajando con Cosecha Imperfecta, empresa que ofrece verduras que no aceptan las grandes cadenas de supermercados y que muchas veces botan a la basura, porque están deformes, pero las adquirimos y sacamos una línea de berenjenas.
 
By María
Manuela y Lucas Iribarren.
web:www.bymaria.cl
@_BYMARIA @BARRADEPICKLES
contacto@bymaria.clventas@bymaria.cl

Manuela Iribarren con la línea de productos.