Detallitos franceses para la carta de cafeterías, hoteles y restaurantes

Hirondelle pone su sello en la elaboración de macarones

Los coloridos macarones son en base a harina de almendras y clara de huevo. Hay de lavanda, vainilla, chocolate y pétalo de rosa pero también hacen sabores a pedido para el canal Horeca.  

Makarena Zapata R. 

Según su variedad, son masitas dulces de distintos colores suavemente rellenas, pero antes de confundir el raciocinio con la imagen de un alfajor común y silvestre, el macaron es un pastelillo dulce de origen francés que data de finales del siglo XVIII, pero que hasta el día de hoy mantiene la fama de ser uno de pilares de la pastelería más complicados de elaborar y hornear.
Al tanto de esta condición, Carolina Frothingham decidió de igual forma dedicarse a la elaboración de macarones en un intento por desmarcarse de la poca innovación en pastelería y repostería. "Hace cinco años la oferta de este tipo de pastelillos era súper escasa. Prácticamente no existía y ahí mismo detecté la necesidad. Me demoré varios meses en dominar la técnica que mantengo bajo siete llaves porque realmente son súper delicados de conseguir. Así partió Hirondelle -que significa golondrina en francés- cuyos primeros clientes fueron banqueteras y distintos hoteles que obsequiaban macarones a sus huéspedes a modo de ameneties".
Los sabores más clásicos que ofrece esta pastelería especializada en el macaron son chocolate, vainilla, frambuesa, limón y pétalo de rosa a los que también se suman uno que otro desarrollo más específico y por temporada como el de limón, maracuyá chocolate blanco y hasta uno de higo en verano. El abanico completo de sabores está disponible en (https://bit.ly/2Cwm6V8) o directamente en las vitrinas del local que recientemente abrieron en la comuna de Vitacura.
"Quisimos abrir un tienda física para darnos a conocer entre el cliente final, pero hasta el día de hoy nuestro fuerte es el canal Horeca donde también tenemos la capacidad para desarrollar macarones a pedido. Esto por si algún restaurante u hotel desea complementar su carta de postres con algún pastelillo que no tengamos disponible como variedad. Por otro lado, cabe destacar que todo nuestro abanico de macarones no contiene ningún tipo de premezcla, preservante o saborizante. Son 100% naturales y hechos a pulso", agrega Frothingham.
-¿Qué características debe tener un buen macaron?
-Lo primero es destacar que la receta base de cualquier macaron es la medida justa de clara de huevo con harina de almendras por lo que es una mezcla súper maleable por clima o temperatura. Con eso zanjado será un breve tiempo al horno el que dará como resultado un macaron con una textura que al mascarse no resulte demasiado chiclosa ni crujiente mientras que el sabor debe ser suave y equilibrado. En apariencia son súper delicados por lo que hay que tener ojo con la manipulación de los macarones porque pueden picarse o trizarse si es que se los golpea o pasa a llevar. Duran siete días.
-¿Con qué se sirve o disfruta uno de estos pastelillos franceses?
-Como son cada vez más reconocidos entre los consumidores hoy se ofrecen para acompañar el café, como postre en porción de unidad o incluso he visto que los usan en copas de helados. El pedido mínimo es de $50.000, pero además de los macarones también ofrecemos tortas al europeo donde en vez de bizcocho se ocupa mousse, eclairs, galletas y tartaletas porcionadas para así estandarizar la porción de venta que llega al cliente final.

"Hasta el día de hoy nuestro fuerte es el canal Horeca", recalca Carolina Frothingham.

La duración estimada de los macarones es de siete días.