Ponen a la venta bacterias que ayudan a su negocio

Su trabajo consiste en acabar con las grasas y atacar el mal olor

Dos son las innovadoras soluciones que tiene la empresa Biomax -Biobloc 2.2 y GTC 3X- que destacan entre otras cosas por ser amigables con el medio ambiente.  

Makarena Zapata R. 

Si bien al hablar de bacterias lo primero que se viene a la mente son aquellas responsables de algunas enfermedades e infecciones, hay otras más benévolas y de las que "poco y nada se sabe", según explica Enrique Visscher, gerente comercial de una empresa dedicada justamente a trabajar con estas últimas. Tal como detalla, "Biomax es una marca y una compañía que tiene la representación de unas bacterias funcionales provenientes de Canadá y cuya función es alimentarse del aceite que generan todo tipo de recintos donde hay cocinas de alto funcionamiento. Se trata de una solución mucho más limpia y eco amigable en comparación a la oferta que ofrece el mercado actual de los aceites residuales, ya que lo normal es contratar un camión que se encarga de retirar estos desperdicios sin la seguridad de que finalmente lleguen a una planta de tratamiento".
De acuerdo a la necesidad de los establecimientos comerciales, Biomax cuenta con dos tipos de soluciones. La primera alternativa es Biobloc 2.2., una especie de bloque color rosado en forma de cilindro que debe depositarse de forma manual al interior de la cámara donde se acumulan estos desperdicios. Como está cargado de una enorme cantidad de bacterias, ellas primero colonizan dicho espacio y luego comienzan a consumir los aceites residuales. Este proceso puede tomar entre cuatro y ocho semanas.
"El buen uso del Biobloc 2.2 evita que las cañerías se tapen por la acumulación de grasas y elimina de raíz los malos olores. Cabe destacar que el uso de un solo bloque está recomendado para una cámara con capacidad de 3.800 litros, desde ahí hacia arriba", agrega Visscher.
La segunda solución se llama GTC 3X, una bomba dosificadora de bacterias en un formato líquido color turquesa. La gracia de este aparato es que permite a los locatarios mantener las manos bien lejos de la grasa ya que esta bomba dosificadora es la que va mezclando -previa orden de un temporizador- la cantidad justa de líquido con bacterias al flujo de agua.
"El GTC 3X está recomendado para recintos que buscan ofrecer un servicio de alta calidad más allá de la comida ya que su uso reduce la acumulación de lodos en la trampa de grasa y mejora el drenaje de las cañerías. Lo más importante aquí es que todo está automatizado. Para más información, pueden visitar la web http://www.biomax.cl", dice el ejecutivo.

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Un mercado en crecimiento

Junto a las bacterias que devoran aceite, hay otras especies con buen gusto para fagocitar petróleo, celulosa y hasta el contenido de los pozos sépticos. Por eso, desde Biomax no han escatimado en esfuerzos por dar a conocer las distintas bondades que yacen en el uso de este tipo de microorganismos.
Según Enrique Visscher, "el mercado de las bacterias funcionales viene creciendo a tasas de un 20% anual siendo las bacterias más importantes las relacionadas con la grasa y los pozos sépticos. Entre los nombres de los microorganismos que están presentes tanto en el Biobloc 2.2 como en el líquido del GTC 3X están las bacillus subtillus, bacillus lichenformis y las bacillus megaterium, entre otras".
 

"Los productos operan muy bien en recintos con cocinas de alto funcionamiento", dice Visscher.