Representantes de una sabrosa tradición española
Trujillo lleva más de 20 años importando jamón serrano desde la madre patria
Esta compañía cuenta también dentro de su stock con productos como butifarras, longanizas, longanicillas y chistorras, entre otros.
Fecha de publicación
2016-10-24
Escrito por
Makarena Zapata R.
A partir de la liberalización de las importaciones de jamón serrano de España, por ahí por mediados de los noventa, Miguel Ángel García por fin encontró la oportunidad que andaba buscando para montar su propio negocio de comida. Pero como su plan no era independizarse en su país natal, se valió del consejo de un buen amigo chileno, quien le contó sobre las bondades del mercado nacional como posible nicho para ofrecer el jamón serrano español. "Con esa meta en mente, me vine a Chile hace más de 20 años. Al principio fue un completo desafío porque muy poca gente conocía este producto y los dos primeros años tuve que abocarme al tema de las degustaciones e ir educando al consumidor. Mis primeros clientes fueron hoteles y restaurantes así que el desarrollo de formatos para el canal Horeca siempre estuvo contemplado en el negocio".
Esos fueron los primeros pasos de Trujillo (http://www.trujillo.cl) compañía que se dedica a importar distintas variedades de jamón serrano desde España, además de otro tipo de alimentos como quesos de cabra y oveja, sangría embotellada, productos congelados de panadería y platos preparados de cocina típica de la madre patria. Eso, aparte del desarrollo de una completa línea de embutidos típicos como butifarras, longanizas, longanicillas y chistorras, entre otros.
"Dejando de lado esta línea de productos complementarios, nuestra gran tradición como marca va por el lado del jamón serrano, que ha tenido un gran desarrollo. Si al principio solo importaba pequeñas cantidades, hoy traemos alrededor de 25 o 30 containers al año. Tenemos distintos tipos, etiquetas y formatos según las necesidades de los clientes. Por ejemplo, jamones que han pasado por seis o siete meses en proceso de curación hasta unos de tipo ibérico- reserva, que tienen entre 36 y 48 meses de curación".
-¿Tantos meses puede tomar el proceso?
-Sí. Por lo mismo es que el jamón serrano español es considerado como un algo único ya que el proceso para obtenerlo requiere de bastante paciencia y trabajo, si tenemos en cuenta de que se trata de una pata de cerdo curada en sal y colgada durante meses en salones de secado. Nosotros contamos con una serie de variedades de jamón que son etiqueta verde, etiqueta roja, etiqueta negra y etiqueta negra reserva. Todos ellos están tanto en formatos pata entera como laminado, que van entre los 65 a los 500 gramos.
"No tenemos un mínimo de despacho para el canal Horeca", dice García.
Todos los productos que trae esta empresa son de primer nivel.