Creó sabrosos snacks para los celiacos más golosos

Marcela Miranda partió el 2010 con Snack Adventure

Su catálogo de productos lo conforman galletas, galletones, magdalenas y distintos tipos de premezclas.  

Makarena Zapata R. 

"Siempre he sido una persona súper trabajadora y, tras once años viviendo entre Bélgica y España, decidí regresar a Chile. Volví porque echaba de menos mi país, sentía que me faltaba ver la cordillera, escuchar el himno nacional y un montón de otras cosas que uno añora cuando está lejos de su tierra. La cosa fue que regresé llena de ideas para poder cumplir una de mis grandes metas: tener un negocio propio".
Con ese objetivo en mente, Marcela Miranda empezó a hurguetear en su cabeza para encontrar un nicho atractivo para emprender, el que apareció al poner atención en sus amistades ya que muchos de ellos o sus hijos sufrían algún tipo de intolerancia a alérgenos presentes en las comidas, principalmente al gluten, presente en la harina de trigo, cebada, avena y centeno.
"Recordé que en Europa había montones de productos que respondían a esta problemática y decidí ver qué pasa en el país. Probé cosas que se vendían en tiendas especializadas y supermercados y la verdad es que no tenían buen sabor ni textura, eran caros...y qué decir de su presentación. Por eso pensé en que podíamos crear una línea de productos".
Tras dos años de ardua investigación, y a puro ensayo y error en la cocina de su casa y de algunas panaderías, nació Snack Adventure (http://www.snackadventure.cl). "Partimos con capital propio y la adjudicación de dos Capitales Semilla en el año 2008 y 2010, que nos permitieron comprar máquinas y adaptar una planta 100% libre de gluten que hoy elabora galletas, galletones, pan, magdalenas y distintos tipos de premezclas. Incluso, hicimos un pan de pascua para Navidad", cuenta orgullosa Miranda.
-¿Y cómo dieron a conocer Snack Adventure?
-Nuestros primeros clientes fueron los supermercados, porque cuando recién partimos el tema de la celiaquía no era conocido por todos. Pese a que trabajar con este tipo de establecimientos puede resultar un poco complicado, esquematizamos tan bien nuestras labores que siempre se logró cumplir con todos los pedidos. Y eso que al principio nuestra pequeña fábrica era súper artesanal. Había que subir los sacos de harina de arroz arriba de la espalda y etiquetar a mano empaque por empaque. Hoy, tenemos un pequeño ascensor para descargar la mercadería y máquinas que nos ayudan a agilizar el proceso de empaque.
-¿Qué te causa mirar a tu alrededor y ver todo lo que has logrado gracias a tu emprendimiento?
-Lo más importante para mí es ver que estás ayudando a la gente porque como nuestra fábrica también es sala de ventas llegan todo tipo de personas con historias terribles. Personas sanas y embarazadas que quieren alimentarse mejor y otras celiacas, que están casi en los huesos y que ya no saben qué comer porque todo les hace mal. Nosotros les damos a probar nuestros productos y, no es por creerme el cuento ni nada, pero son súper ricos. Ellos se van felices porque de una u otra forma les estamos dando ayudando a partir de cero y mejorar su calidad de vida.
Marcela Miranda agrega que en su camino de emprendimiento ha sido vital el apoyo de Mentores por Chile, "ya que gracias a la asignación de un mentor es que podemos tomar distintas decisiones de forma más segura e informada. Es un respaldo que nos ha ayudado a crecer enormemente en estos años".

"El obtener dos Capitales Semilla nos permitió hacer importantes inversiones "
Marcela Miranda 

Marcela Miranda.

Todos estos productos los elabora en su propia fábrica.