Emprendedores le rinden honor a su abuelita

El Alquintazo, carritos de pizzas y tacos

Entre Vanesa Rojas, su pololo y su hermano se reparten la pega de tres carritos de comida rápida gourmet.  

Makarena Zapata R. 

"Estoy estudiando ingeniera comercial y Nicolás, mi hermano, gastronomía, pero aparte de eso ambos habíamos trabajado en un local en donde vendían tacos y por ahí partió todo".
Vanesa Rojas (25), de Copiapó, terminó radicada en Santiago a principios de abril. Acá retomó sus estudios y encontró un nuevo trabajo, pero la idea de los tacos le seguía dando vueltas en la cabeza y junto a su hermano, unieron ideas y recetas para lanzarse con algún negocio. Es más, ocupó un sueldo completo en comprar todas las partes para mandar a hacer un carrito adaptado con una plancha y un sitio para poner salsas. Una primera inversión que le terminó costando alrededor de 300.000 pesos.
"Un día miércoles salimos a pata mi hermano, yo y el carrito. Nos fuimos a poner afuera del supermercado Lider que está entre las calles General Velásquez y la Alameda porque era un sector súper recurrido y que nos quedaba cerca de la casa. Al principio llamábamos harto la atención porque a la gente le gusta comer rico y nosotros éramos la novedad con la venta de tacos, que es una mezcla estándar que combina pollo, carne de soya, longaniza, mix de verduras y tomate en una fajita, más una serie de salsas a elección como la de porotos negros-ajo, tomate-albahaca y perejil, entre otras".
Aquel fue el puntapié de inicio de El Alquintazo, un emprendimiento de comida callejera gourmet que busca regalonear a sus clientes con algo rico, preparado en el minuto y a un precio ultra conveniente. Tan bien les fue a estos hermanos que al poco tiempo mandaron a hacer otro carrito, uno que sería administrado por Nicolás y ubicado en pleno puente Pío Nono para captar a otro tipo de público. "Con ese salto fuimos detectando que las pizzas podían dar más y mejores resultados que los tacos, sobre todo si la masa se preparaba ahí mismo y el cliente podía elegir sus ingredientes. Por lo que juntamos plata y mandamos a hacer un carrito de pizzas con una plancha especial para hornear la masa en cinco minutos", remata.
-¿Y de dónde viene ese espíritu tan emprendedor?
-Es que toda nuestra familia se dedica al comercio y bueno, de ahí también viene el nombre de nuestro negocio porque Alquinta es el apellido de mi abuela materna. Ella ha sido nuestra inspiración durante todo este recorrido porque además de ser seca para los negocios, tiene esa capacidad de convertir la arena en plata, jajajá. 

 

"Detectamos que las pizzas podían dar más y mejores resultados que los tacos"
Vanesa Rojas

Los Rojas tienen su Facebook El Alquintazo.