Un médico apasionado por el comercio

Ricardo Chávez y sus carritos de granizados

En estos ocho años de funcionamiento, GraniJugos le ha dado muy buenos resultados. De hecho, hoy el negocio lo conforman tres carros.  

Makarena Zapata R. 

Llegó hace 14 años al país y pese a su exitosa carrera como médico, Ricardo Chávez no bajó ni por un momento los brazos. Toda la vida se consideró un emprendedor y cuando joven probó vendiendo una infinidad de productos hasta que comenzó a estudiar, trabajar e incluso, partir desde su natal Ecuador. La mudanza, eso sí, tampoco cambió mucho sus ganas de hacer cosas distintas.
"Llegué acá con todos los ánimos y ya con un poquito más de conocimiento sobre qué tipo de cosas les podrían gustar a los chilenos se me ocurrió replicar una idea que en mi país es súper popular. Se trata de locales que venden jugos y batidos de frutas naturales. Ahora, con la idea de ofrecer algo distinto pensé en los carritos que estaban pegando súper fuerte. Yo mismo me dediqué a fabricarlos e hice los contactos con un proveedor de frutas exóticas para elaborar las bebidas y mostrar algo típico de mi cultura", cuenta Chávez instalado en una banca del hospital San Juan de Dios.
Bajo aquel contexto partió GraniJugos, emprendimiento de granizados que lleva ocho años funcionando y que partió con un primer carrito al interior de un Homencenter en la comuna de la Florida. En los inicios ofrecía solamente sabores tradicionales como piña, frambuesa y frutilla pero luego, cuando sus clientes les fueron agarrando el gustito a estos bebestibles, incluyó algunas alternativas más exóticas como mango, lulo y guayaba.
"Pese a que no trabajo directamente en los carritos, durante los ratos libres me dedico a full a ellos. Me doy el tiempo de preparar las mezclas y dejarlas listas, cosa de meterlas en las neveras y distribuirlas a los carritos. Hablo en plural porque si bien partí con uno hoy tengo tres en total. Creo que el éxito ha estado en ser perseverante y apostar por cosas distintas, por supuesto sin descuidar además la calidad de los alimentos", aclara.
-¿Qué ha sido lo más difícil del emprendimiento?
-Dar a conocer cosas exóticas porque los chilenos son súper tradicionales para las comidas y bebidas. Mis granizados vienen en formatos de 500 cc., cuyas mezclas solo se hacen con agua purificada. Una de las bebidas más innovadoras que tengo es la chicha de arroz, que es de origen venezolano. Al principio, cuando la incorporé, tenía muy poca demanda y tenía que botar prácticamente toda la producción. Con el tiempo ha ido cautivando a los clientes. Se elabora en base a leche, arroz y vainilla, y es súper refrescante.

 

Una de las variedades más innovadoras es la de chicha de arroz
Ricardo Chávez

Chávez dice que la gente se siente muy atraída por los granizados.

Todos los carritos los diseñó y fabricó este emprendedor.