Una cajita llena de sabores y sensaciones

Es el eje del emprendimiento de Carla Valencia

Contiene turrones, mermeladas artesanales y distintas variedades de té con especias que ella misma prepara en su cocina, en la localidad de Catapilco.  

Makarena Zapata R. 

Encaramada arriba de una silla y siendo apenas una niña, Carla Valencia seguía atentamente todos los pasos de las recetas que preparaba su abuela para, ojalá, replicarlas cuando tuviera edad suficiente para meterse sola en la cocina. Y así lo hizo. Tanto en el colegio como en la universidad, preparó cuanto embeleco se le ocurrió para agasajar a familiares y amigos, viendo en su talento una oportunidad para emprender.
"Siempre me ha llamado la atención ese aroma rico que sale de la cocina cuando uno prepara cosas dulces. Ese fue un recuerdo súper fuerte que tengo desde la infancia y que quise repetir toda mi vida con la preparación de mermeladas, chocolates, turrones y frutas confitadas. Ahora, resultó que terminé estudiando diseño y luego de trabajar varios años en una empresa de Santiago, con mi esposo nos mudamos a Catapilco (Quinta Región), en donde nació esta oportunidad", cuenta.
Ese fue el puntapié inicial de Petirrojo, (www.petirrojo.cl), emprendimiento que se dedica a elaborar y vender una singular caja cuyo interior está repleto de sensaciones: desde té con distintos tipos de hierbas y esencias, hasta chocolates, turrones y mermeladas de frutas de la estación.
"Fue la mezcla perfecta que pillé entre mis dos grandes pasiones, el diseño y la cocina. Esta caja la imaginé con todos sus detalles, desde la forma del packaging hasta los productos que llevaría adentro y que yo misma preparo en mi casa. Está pensada como una alternativa original para regalos corporativos o personalizados, para gente que valora un sello artesanal, rico y único. Es un regalo con sentido", concluye Valencia.
Cada caja cuesta $15.000. Junto con ella, también vende sus productos por separado, "ya que por estos días estamos en una etapa de darnos a conocer y seguir creciendo", explica.

La gente valora el sello artesanal de este producto.