Doña Mireya le pide ayuda al sol para cocinar

Su restaurante funciona con nueve cocinas solares

En el menú se ofrece desde la típica cazuela hasta el asado de cabrito, que es la especialidad de la casa.  

Fecha de publicación

2014-05-19

Escrito por


Makarena Zapata R. 


La historia de emprendimiento de Mireya Rivera dio sus primeros pasos por ahí por el año 2001 cuando 25 vecinas del sector de Chepiquilla, ubicado en las cercanías de la comuna de Andacollo (Cuarta Región) fueron capacitadas y en un proyecto sobre la fabricación de cocinas solares. De esas 25, dos se interesaron en continuar en este rubro pero solamente una comenzó a preparar toda clase de platillos caseros. "Siempre trabajé desde mi casa vendiendo cosas o ingeniándomelas como podía hasta que mi hija participó de ese proyecto y me contó de lo que se trataba. Primero empecé a hacer mermeladas en la cocina solar y después seguí con las comidas porque la gente se fue pasando el dato sobre mi forma de cocinar. El pequeño comedor instalado en mi casa creció y tuvimos que pedir un préstamo para agrandarlo. Así fue como hace cuatro años nació el restaurante Sol de Andacollo".
La magia culinaria de esta emprendedora surge al interior de nueve cocinas instaladas en su patio. Se trata de cuadrados que se fabrican con madera terciada, fibra de vidrio y que poseen una cámara de color negro que está sellada por una puerta que consta de dos capas de vidrio ¿La idea? Absorber la mayor cantidad de rayos solares para una completa cocción de los platillos. "Se las compro a una señora que también participó en el proyecto y que se enfocó en la fabricación y venta de dichos artículos. En el local caben 60 personas y para atenderlas a todas mi rutina debe partir súper temprano. A las nueve y media de la mañana ya debe estar todo pelado, picado y salteado dentro de las ollas para después meterlas a las cocinas solares. Eso sí, todo debe pasar antes por un leve pre cocido a gas para que la cocción solar no demore tanto ya que solo cabe una olla por cocina", agrega.
-¿Qué tipo de platillos ofrece su restaurante?
- Mis mejores platos son el vacuno, la cazuela, las chuletas, el pollo y el asado de cabrito, que es la especialidad de la casa, aunque también hago arroz, puré y postres que pueden ser mote con huesillos o leche asada. Hay que ser súper disciplinada cuando se depende del sol para cocinar, estando muy atenta a todos sus movimientos. Por ejemplo, hay que estar girando constantemente las cocinas para aprovechar los rayos de la mejor forma. ¿Cuánto se demoran los platos en estar listos? 40 minutos el arroz graneado, una cazuela de pollo demora una hora y el asado de cabrito tres horas. (Más información en www.restaurantesolarsoldeandacollo.cl)
-¿Y qué pasa cuando no hay sol?
-Jajajá. Ahí no me queda otra que empezar a cocinar a gas. La cocina solar me dura entre octubre y mayo porque a partir de junio empieza a llegar menos sol y con eso no alcanzo a preparar nada. De todas formas, sigue viniendo la gente y esos ingresos me han permitido pagar mis cuentas e ir agrandado de poquito mi local. Hoy me siento toda una emprendedora.


Rivera cuenta que la curiosidad atrae a mucha gente a su local.

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Estas cocinas se pueden usar entre los meses de octubre y mayo.

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