Feriantes de Ñuñoa integraron al comercio informal
Iniciativa de las ferias Emilia Téllez y Ortúzar
Según explica Pedro Cabrera, estas personas deben cumplir con algunos requisitos como ser vecinos de la zona y no ofrecer los mismos productos que se venden en las ferias.
Fecha de publicación
2024-09-16
Escrito por
Ciro Colombara C.
Según datos de la Confederación Gremial Nacional de Ferias Libres (ASOF C.G.), en la actualidad el comercio ilegal triplica a la cantidad de feriantes, calculando que aproximadamente un 30% corresponde a bandas organizadas que llegan en camiones a las ferias a entregar productos como cigarrillos, remedios y licores.
En la comuna de Ñuñoa, una agrupación de feriantes puso en marcha una iniciativa que busca hacer frente a esta realidad de manera positiva. Tal como cuenta el presidente de la Asociación Gremial Feria Emilia Téllez, Pedro Cabrera, "tratamos de buscar una manera de integrarlos, por decirlo así, manteniendo un cierto orden y estructura. Vimos, por ejemplo, que había gente que llevaba años trabajando a un costado de esta feria y pensamos que podíamos hacer algo".
Cabrera agrega que presentaron una propuesta al municipio de Ñuñoa, planteándoles a sus autoridades el abrir un espacio para esas personas que se desempeñan de manera informal. "La situación económica es complicada y entendemos, por lo mismo, las opciones que pueden tomar para generar dinero. La municipalidad acogió muy bien la idea así que empezamos a integrarlos de una forma organizada y cumpliendo algunos requisitos".
¿Cuáles son esos requisitos?
"En primer lugar, que fueran vecinos o gente que llevara años instalados acá. En segundo lugar, que respetaran una determinada ubicación que les dimos, que sus puestos fueron de un cierto tamaño y que todos tuvieran también unos toldos blancos, como una manera de estandarizar el entorno. Otro punto importante es que tuvieran rubros distintos a los tradicionales que trabajamos nosotros".
Pedro Cabrera cuenta que en la feria Emilia Téllez hay 55 puestos de feriantes y alrededor de 22 puestos de estos otros comerciantes. "Entre los rubros que trabajan están ropa, artesanías y artículos de cocina. Como ha tenido buenos resultados, lo llevamos también a otra de las ferias de la comuna, la de calle Ortúzar".
"Lo importante era mantener cierto orden y estructura", dice Cabrera.
Un requisito para todos los nuevos puestos era tener un toldo blanco.