Este negocio es el monarca de los asados

Rey del Carbón de Espino tiene más de medio siglo de historia

Se trata de un emprendimiento que hoy está en manos de los hijos de su fundador.  

Ciro Colombara C. 

Pilar, Jeannette y Hernán Encina son miembros de lo que podríamos llamar la monarquía comercial santiaguina, magnos representantes de negocios con larga historia que llevan el mayor título nobiliario posible. En este caso puntual, estamos hablando del Rey del Carbón de Espino (Avenida El Salto 2332), emprendimiento que comenzó su padre hace más de 50 años.
Hace aproximadamente seis años que estos hermanos tomaron las riendas del negocio, que funciona de lunes a lunes y que tiene una demanda pareja durante todo el año. "En parte, eso se debe a que somos bien conocidos, si aquí llega a veces gente de comunas bien lejanas a comprar porque alguien les dio el dato", cuenta Pilar.
Esta comerciante agrega que ya se están preparando para responder a la alta demanda que esperan debido a las largas celebraciones de Fiestas Patrias. "Cuando es un feriado largo llegamos a vender entre tres mil y cuatro mil kilos de carbón. Yo trabajo también en otra cosa pero durante la semana del 18 voy a estar 100% aquí en el local con mis hermanos, es que al menos tienen que haber tres personas atendiendo.
-Una duda. ¿Qué diferencia al carbón de espino de otros tipos de carbones?
-Con el carbón de espino tienes la garantía de que va a durar para todo el asado y muchas horas más. De hecho, si al otro día uno remueve las brasas, aún van a quedar algunas encendidas. Esa propiedad no la tiene ni el carbón vegetal ni el blanco, entre otros. Si a veces la gente ni siquiera alcanza a terminar un asado con ellos, se apagan antes.
-¿Y qué va a pasar con sus precios para estas fiestas?
-Nosotros no cambiamos los precios en todo el año. Diría que ese es uno de los elementos que caracterizan al Rey del Carbón de Espino, la preocupación por el bolsillo de nuestra clientela. Todos los años uno ve cómo sube la carne, suben los vegetales...todo sube. Nosotros le damos una ayudita a la gente manteniendo los precios.
 

"El carbón de espino se mantiene encendido muchas horas", dice Pilar Encina.

El negocio se ha convertido en una verdadera picada santiaguina.