Buen mix: un cappuccino instantáneo con chocolate belga

Lo importa comercializadora El Yarro para el canal tradicional

Se espera que a principios de diciembre ya esté presente en almacenes de barrio.  

Un cappuccino instantáneo pensado para disfrutar en la casa u oficina a cualquier hora del día. Esa es la apuesta de comercializadora El Yarro, la cual importa directo desde Malasia, Caferite- Cappuccino di Torino, cuya empresa de origen es Food Empire, dueña de la marca creada en 1992.
Teruel Avendaño, gerente comercial de comercializadora El Yarro, explica que "este producto, si bien es comparable con alguno de los actores del mercado, tiene una diferenciación, porque cuenta con un topping de chocolate (que viene aparte del producto en un succhet), que una vez preparado, es casi como tomar uno hecho por un barista".
Álvaro Muñoz, gerente de marketing de la mencionada empresa, añade que muchas marcas de café instantáneo han bajado la calidad del producto, disminuyendo su gramaje, para reducir la presencia sellos negros en los envases.
"En la búsqueda de nuevas firmas para traer al mercado chileno, encontramos esta marca de Malasia cuyo foco es la calidad, por ejemplo, el chocolate que va encima tiene gramos de chocolate belga. En su preparación se genera la espuma necesaria (elemento diferenciador, según los baristas) y además tiene el topping, que puede o no agregarse. Es nuestro ingreso a la categoría y estamos empezando a trabajar con esta multinacional Food Empire. Es el primer paso dentro del mundo de las bebidas calientes", añade.
¿A través de qué canal buscan comercializar el producto?
Avendaño: "Hoy estamos muy presentes en el canal tradicional, donde más crece el consumo de café. Hemos presentado esta innovación a una gran cantidad de clientes, creemos que nos dará un plus interesante, solo estamos esperando que llegue el embarque y a principios de diciembre estará listo para comercializar".
Muñoz: "Durante la pandemia, que nos fuimos todos a las casas, se limitó la experiencia de ir a la cafetería. Esto hizo que en la casa la gente adoptara otras maneras consumir café y así empezaron a aumentar las distintas opciones de cappuccino. El canal tradicional no tiene la opción de las cápsulas, como una alternativa al que hace el barista, porque son demasiado caras. Por este motivo, nosotros tomamos esta oportunidad. En este café vienen 25,5 gramos y otros actores del mercado, para tener menos sellos, ofrecen 23 gramos o quizás menos para 120 ml de bebida, sacrificando calidad y el sabor por eliminar los sellos, nosotros no les tenemos miedo a ellos".

25,5 gramos de cada producto son una garantía de calidad.

Muñoz y Avendaño, de El Yarro.