Cristalerías Chile realizó un piloto para reemplazar las fundas de plástico de los pallets

La prueba, con bueno resultados, se realizó con CCU

La iniciativa surgió de tres profesionales de la manufacturera, con el apoyo de Bio Elements. El polímero se reemplazó por bio mangas termocontraíbles, que son biodegradables y compostables.  

El plástico utilizado para envolver los pallets de las botellas que produce Cristalerías Chile comenzará paulatinamente a pasar al olvido. Esto, tras los buenos resultados que arrojó un piloto que se realizó con CCU, uno de los principales clientes de la manufacturera nacional.
En la prueba se reemplazó el polímero por bio mangas termocontraíbles que se pueden biodegradar y compostar.
De acuerdo con información proporcionada por Cristalerías Chile, las bio mangas no solo son amigables medioambientalmente, sino que también ofrecen una gestión más responsable al descomponerse sobre un 90%, tanto en condiciones de compostaje, como en entornos menos óptimos, según las normas ISO 14853 e ISO 14855. Estas propiedades están certificadas por la Dirección de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de la Universidad Católica (Dictuc), asegurando también la integridad de los envases.
Según explicó Claudia López, subgerenta de sostenibilidad de Cristalerías Chile, "la compañía produce 450.000 toneladas de vidrio al año y 1,8 billones de envases anualmente. Son 3.000.000 diarios y más de la mitad corresponden a botellas para vino de exportación y se va al extranjero".
Con el plástico de las fundas que envuelven los pallets - , la empresa venía trabajando hace cerca de 10 o 12 años. El primer esfuerzo que se fue dejar de importar plástico de Alemania y producirlo en Chile.
Luego, se redujo el grosor del plástico, sin que eso significara un deterioro para el embalaje de los pallets y las botellas. "Tenía que ser elástico y que garantizara las mismas condiciones de seguridad, pero usando menos gramaje. Y, por último, era necesario devolver plástico al proceso de elaboración del que estábamos haciendo", sostiene López.
Según López, la idea de reemplazar el plástico nació de tres profesionales de la compañía: Camila Salazar, Sebastián Epul y Javiera Phillippi. Ellos empezaron a analizar de qué manera el embalaje podía ser más circular. Por tal motivo, empezaron a analizar las fundas y preguntarse por qué no podían ser más agresivos, no quedándose solo con la posibilidad de reciclar el plástico, sino que también abriéndose a la posibilidad de buscar una materialidad biodegradable y compostable.
"Esto era muy complejo porque nosotros vendemos envases para vinos y otros líquidos de la industria alimentaria", precisó la ejecutiva.
Salazar, Epul y Phillippi se encontraron con un partner estratégico que es Bio Elements, que ya tenía la experiencia trabajando con polímeros y con ellos se ha ido avanzando en el diseño.
La propuesta debía considerar un material que permitiera embalar los pallets a la misma velocidad que el plástico tradicional, de no romperse, tampoco biodegradarse antes del tiempo estipulado y de esta manera, mantener las mismas condiciones de resistencia e inocuidad, ya que los envases viajan cientos de kilómetros y están acopiados en los centros de bodegas muchas empresas.
"Con las fundas termocontraíbles el cliente puede seguir haciendo lo mismo de siempre que con el embalaje plástico: podrá venderlo o disponerlo en los rellenos sanitarios (en un periodo de 6 a 20 meses). La segunda opción es que Cristalerías Chile y Bio Elements se lo lleven, sacándolo de las instalaciones de los clientes y lo devolvemos al proceso productivo, haciendo nuevas fundas termocontraíbles. Una tercera alternativa es compostarlo en un centro de compostaje autorizado"
Para López es importante mencionar que estas fundas no tienen ningún costo extra para los clientes y, con esta iniciativa, Cristalerías Chile está reduciendo la emisión de CO2 en hasta un 60%.
"Tenemos como meta ir cubriendo el 30% de la capacidad y aspiramos a que en muy poco tiempo tendremos el 100% del servicio abastecido con este tipo de material. En 2025 tendremos cero residuos en nuestras plantas productivas", precisa.
 

La meta del equipo de Cristalerías Chile es tener en poco tiempo el 100% con el nuevo material.