El nostálgico regreso de la leche en botella
Lácteos San Ignacio lanzó una línea en envases de vidrio, reciclables y reutilizables
Gracias al proceso de elaboración, preserva en su estado original las vitaminas y proteínas. Viene en variedades descremada, semi descremada y sin lactosa.
Fecha de publicación
2018-08-06
Escrito por
M.M.
Elaborar productos artesanales de calidad, considerando la nostalgia del pasado y el cuidado del medio ambiente. Eso es lo que motivó a Lácteos San Ignacio a lanzar al mercado una leche realmente fresca, envasada en origen y pasteurizada a baja temperatura, lo que mantiene su sabor y aroma natural, preservando todas las vitaminas, enzimas y proteínas propias de este producto. Una vez envasada en formato de un litro, es refrigerada y puesta a disposición de los clientes para ser consumida fresca ya que tiene una duración máxima de 15 días a contar de su fecha de elaboración.
Por su proceso de elaboración esta leche es única en el país. A la vez, está en línea con la forma más habitual de consumo de dicho producto en todos los países desarrollados.
Se puede encontrar en su versión descremada, semi descremada y sin lactosa. Está disponible, además, en una nueva y delicada línea de envases de vidrio, reciclables y reutilizables.
Lácteos San Ignacio es una empresa familiar ubicada en Bulnes, en el corazón del Valle de Itata (VIII Región), que hace más de 100 años se dedica a la agricultura, ganadería y lechería. Hace más de 35 años se ha enfocado también a la elaboración y producción de lácteos como quesos frescos, maduros y mantequilla.
Esta leche viene en formato de un litro.